La Alcaldía de Ibagué propone endeudarse por $40.000 millones para reparar la Avenida Ambalá, reconstruir la vía entre la calle 103 y El País, y modernizar redes de acueducto y alcantarillado. La incomodidad crece entre concejales que advierten riesgo de endeudamiento histórico.
La Administración Municipal de Ibagué anunció la intención de solicitar un empréstito por $40.000 millones con destino a obras de infraestructura vial y servicios públicos. Este crédito, informado por el secretario de Hacienda Ángel María Gómez, forma parte de la estrategia para reparar vías deterioradas, mejorar redes de acueducto y alcantarillado, y responder a las necesidades crecientes de la población.
Esta solicitud se presenta menos de un año después de un crédito anterior por $150.000 millones, lo que ha generado inquietud entre sectores del Concejo Municipal y ciudadanos. La preocupación principal gira en torno al historial de endeudamiento de la ciudad y la capacidad real de ejecución de las obras propuestas sin incurrir en sobrecostos o demoras injustificadas.
El proyecto de crédito contempla como obra prioritaria la reconstrucción de la vía entre la calle 103 y el sector El País, así como la reparación integral de las redes de acueducto y alcantarillado bajo responsabilidad del IBAL. Estas intervenciones buscan mejorar la movilidad urbana y la calidad de los servicios básicos para los habitantes, especialmente en zonas con infraestructura deteriorada.
Ángel María Gómez defendió que el municipio tiene capacidad de pago suficiente, y propuso que el crédito sea directo, sin intermediarios, para agilizar los procesos. Además, afirmó que la firma Fitch Ratings ha ratificado la sostenibilidad financiera de Ibagué, lo que, según él, respalda la viabilidad de esta operación financiera.
No obstante, concejales como Andrés Zambrano han manifestado su oposición. Para Zambrano, la ciudad está alcanzando niveles de endeudamiento histórico, sin claridad sobre cómo se medirá el impacto social y económico de las inversiones. También advirtió que algunas obras podrían quedar como “elefantes blancos”, si no se aseguran recursos de mantenimiento y seguimiento adecuados.
La oposición añade que la administración municipal aún no ha demostrado plena eficiencia ni transparencia en proyectos anteriores, lo que genera dudas sobre la responsabilidad con la que se gestionará este nuevo crédito. Además, se señala que aprobar más deuda sin estudio de resultados pasados podría comprometer las finanzas futuras del municipio.
La Alcaldía ha planteado que la aprobación del crédito debe hacerse antes de que entre en vigencia la Ley de Garantías, lo que permitiría adelantar las obras sin contratiempos legales o burocráticos. Este apuro ha sido criticado por quienes señalan que prisa y deuda no siempre resultan en buenas obras si no hay planificación.
Si el crédito se aprueba, las obras podrían comenzar oficialmente en 2026 y supondrán un alivio para muchos sectores urbanos que enfrentan problemas de movilidad, deterioro vial, interrupciones del servicio de agua, y fallas en alcantarillado. Para la Alcaldía, esta inversión sería estratégica para mejorar la calidad de vida de los ibaguereños y generar un impulso en infraestructura básica.









