El pasado 25 de septiembre, la Cámara de Diputados de México votó de forma unánime a favor de elevar a rango constitucional el programa “Jóvenes Construyendo el Futuro”. La iniciativa, respaldada con 473 votos, es considerada un paso fundamental para fortalecer los derechos laborales y educativos de la juventud mexicana. Como observadora de este proceso, participó Alejandra Cedano, delegada del Gobierno de Colombia, quien resaltó la importancia de este proyecto en la formación y el empleo juvenil.
Cedano subrayó que este programa mexicano guarda similitudes con la propuesta “Jóvenes en Paz” impulsada por el presidente colombiano Gustavo Petro. Ambos proyectos buscan no solo mejorar las condiciones laborales de los jóvenes, sino también reducir la exclusión social y combatir el desempleo, especialmente en sectores mamarginados.
Pese a las críticas de sectores conservadores que estigmatizan las políticas de apoyo juvenil, “Jóvenes Construyendo el Futuro” ha logrado consolidarse como un referente en las políticas públicas de México. La ministra del Trabajo de México explicó que este programa no solo ofrece oportunidades laborales, sino que es un instrumento clave para la paz y la seguridad, al reducir los niveles de violencia entre los jóvenes.
El presidente colombiano Gustavo Petro ha mostrado gran interés en este tipo de iniciativas, enfatizando que el futuro de las naciones depende de la juventud. “Si la juventud está a la vanguardia se hacen las revoluciones, si la juventud está en la retaguardia nacen los fascismos”, afirmó Petro, en apoyo a la relevancia de este tipo de programas.
Con la aprobación constitucional de “Jóvenes Construyendo el Futuro”, México demuestra su compromiso con el bienestar de su población joven, alineándose con los esfuerzos de Colombia por ofrecer a las nuevas generaciones un futuro más prometedor. Ambos países consolidan su enfoque en políticas que garanticen inclusión, trabajo digno y paz social.
Este evento representa un hito en la cooperación entre México y Colombia en materia de políticas juveniles, lo que podría sentar un precedente para otras naciones de América Latina que busquen replicar estos modelos para enfrentar los desafíos de la juventud.