Una volqueta cargada con 24 artefactos explosivos fue abandonada cerca de un batallón en Tunja, generando una emergencia que obligó a activar protocolos antiexplosivos. Cinco personas resultaron heridas y se identificó a alias ‘Poeta’ del ELN como el responsable. La comunidad, a través del Plan Buen Vecino, alertó sobre el vehículo sospechoso.
En la madrugada del 8 de noviembre de 2025, Tunja se vio sorprendida por un intento de atentado cuando una volqueta cargada con 24 artefactos explosivos fue abandonada cerca de un batallón militar. La intervención de la comunidad, que reportó el vehículo sospechoso a través del Plan Buen Vecino, permitió que las Fuerzas Militares y la Policía se desplazaran rápidamente al lugar. Sin embargo, la operación para realizar la detonación controlada de los explosivos fue complicada por el sistema de temporización de los artefactos, lo que elevó considerablemente el riesgo de una explosión descontrolada.
Durante el operativo, dos de los explosivos fueron hallados fuera del vehículo y neutralizados por equipos especializados. Afortunadamente, aunque la explosión de uno de los artefactos causó daños a la infraestructura cercana, no se registraron víctimas fatales, pero sí cinco personas heridas, quienes fueron atendidas de inmediato por los servicios médicos locales.
Este intento de atentado ha sido atribuido al Frente José Adonay Ardila Pinilla del ELN, que opera en las regiones de Arauca, Casanare y Boyacá. Las autoridades identificaron a alias ‘Poeta’ como el cabecilla principal de la acción terrorista y han ofrecido una recompensa de hasta 500 millones de pesos por información que conduzca a su captura. Otros miembros de la organización, como alias Eliecer, La Gata, Jesús Suárez, El Zorro y El Percy, también están siendo buscados.
En respuesta a este ataque, el Ejército Nacional ha incrementado sus operaciones militares contra las economías ilícitas controladas por el ELN. Además, las autoridades han desplegado tropas de la Fuerza de Despliegue Rápido N.º 5 en las zonas más afectadas por las actividades del grupo armado, con el fin de mantener el orden y la seguridad en la región.
Como parte de las estrategias de prevención, el gobierno ha anunciado la instalación de 121 nuevas cámaras de seguridad en municipios estratégicos, especialmente en áreas rurales y urbanas con altos índices de violencia. Este despliegue tiene como objetivo fortalecer la vigilancia y permitir una respuesta más rápida ante posibles amenazas.
Las autoridades nacionales y locales han instado a la ciudadanía a colaborar con las investigaciones y a utilizar las líneas habilitadas para la denuncia de actividades sospechosas: la 147 del Gaula Militar y la 107 de atención nacional. La colaboración ciudadana es clave para desarticular las estructuras criminales y prevenir futuros atentados.
Este atentado frustrado en Tunja es un recordatorio de la constante amenaza que representan las organizaciones armadas ilegales como el ELN en el país, y la necesidad de redoblar esfuerzos para garantizar la seguridad y estabilidad en las regiones más afectadas por el conflicto armado.





