Durante una auditoría de la Superintendencia Nacional de Salud, se descubrieron más de 133.000 unidades de insulina almacenadas en las bodegas de Audifarma, mientras pacientes con diabetes enfrentan escasez del medicamento en los dispensarios.
En el marco de una auditoría realizada por la Superintendencia Nacional de Salud a Audifarma, se hallaron 133.000 dosis de insulina almacenadas en la bodega de la Sabana Occidental. Este hallazgo pone en entredicho la distribución del medicamento, ya que muchos pacientes con diabetes han denunciado desabastecimiento en los dispensarios.
El procedimiento de auditoría se llevó a cabo con estrictos protocolos tecnológicos que, según denuncias, pretendían evitar la filtración de información a la prensa. Sin embargo, la llegada del superintendente de salud, Giovanny Rubiano, cambió el curso de la inspección al solicitar expresamente la revisión de la insulina de 100 mg para diabetes.
El resultado fue la revelación de una gran cantidad de unidades del medicamento almacenadas sin justificación aparente, lo que generó interrogantes sobre la distribución y el acceso de los pacientes a este insumo vital. La situación ha provocado una ola de críticas contra Audifarma, señalada por presuntamente ocultar estos suministros mientras los enfermos enfrentan dificultades para conseguir su tratamiento.
El hallazgo se registró oficialmente en el acta de auditoría, lo que refuerza las denuncias sobre posibles irregularidades en la distribución de medicamentos esenciales. Mientras tanto, sectores de la opinión pública han señalado que esta revelación expone una estrategia para desacreditar las reformas en el sistema de salud impulsadas por el Gobierno Nacional.
Diferentes voces han criticado la presunta manipulación mediática que rodea el caso, argumentando que se busca desviar la atención y confundir a la ciudadanía con tecnicismos jurídicos. En este contexto, el uso del término “auditoría” en lugar de “allanamiento” ha generado controversia, pues algunos lo interpretan como un intento de suavizar la gravedad del hallazgo.
La revelación del almacenamiento de insulina ha encendido las alarmas sobre el manejo de los medicamentos en el país, especialmente cuando hay pacientes que dependen de ellos para sobrevivir. La falta de insulina en los dispensarios y la aparente retención del medicamento en bodegas han sido catalogadas como una amenaza para la salud pública.
Mientras se desarrollan investigaciones adicionales, la Comisión VII del Senado, encargada de debatir la reforma a la salud, enfrenta una presión creciente. La ciudadanía exige respuestas y acciones concretas para garantizar que la distribución de medicamentos no esté supeditada a intereses económicos o políticos.