Durante una rueda de prensa de este lunes 25 de diciembre el Servicio Geologico Colombiano, SGC, expresó que los eventos sísmicos, registrados entre el 24 y el 25 de diciembre, han generado preocupación en la región, aunque la alerta se mantiene en nivel amarillo.
Desde el sector oriental del volcán, aproximadamente a 5 kilómetros del cráter Arenas, se han detectado tres sismos con magnitudes máximas de 2.5, a profundidades de entre 3 y 4 kilómetros. Aunque la cantidad de sismos ha sido limitada, algunos habitantes de zonas cercanas, como La Cabaña y el cañón del río Lagunilla en el departamento del Tolima, reportaron sentirlos.
Adicionalmente, se ha observado un aumento en la actividad sísmica asociada al domo de lava en el fondo del cráter, particularmente entre las 04:50 a.m. y 05:50 a.m. del 25 de diciembre. Estos sismos, de bajo a moderado nivel de energía, están vinculados tanto al fracturamiento de roca como a la dinámica de fluidos.
A pesar de estos cambios, las autoridades mantienen el estado de alerta amarilla, indicando que el volcán está activo con alteraciones en el comportamiento, pero la probabilidad de una erupción considerable es baja. Sin embargo, el SGC enfatiza que el volcán puede desestabilizarse rápidamente, lo que podría llevar a elevar la alerta a nivel naranja o incluso rojo.
Se insta a la comunidad a conservar la calma, seguir las actualizaciones proporcionadas por el Servicio Geológico Colombiano y estar preparados para cualquier eventualidad. Aunque se mantiene una vigilancia constante, se recuerda a la población que el Nevado del Ruiz tiene un comportamiento variable e inestable, y se deben tomar precauciones adecuadas.