El reconocido periodista deportivo cuestionó el formato del fútbol colombiano y defendió la histórica campaña de 96 puntos del equipo ‘Pijao’, calificándola como una muestra de superioridad técnica.
El periodista deportivo César Augusto Londoño generó un intenso debate tras analizar el cierre de la temporada en el fútbol profesional colombiano. Para el comunicador, el Deportes Tolima se consolidó como el mejor equipo del año a pesar de no haber levantado el trofeo en la gran final. Londoño enfatizó que la regularidad mostrada por el conjunto de Ibagué merece un reconocimiento especial por parte de la prensa y la afición nacional. Con una contundencia estadística notable, el equipo logró acumular 96 puntos a lo largo de los dos semestres de competencia oficial. Según el analista, esta cifra es el reflejo de un trabajo serio y consistente que supera cualquier racha momentánea de otros clubes. El rendimiento del cuadro ‘Vinotinto y Oro’ lo sitúa, según los números, en la cima del balompié nacional durante este periodo.
Londoño fue enfático al declarar que “96 puntos no se consiguen en una bolsa de papitas”, subrayando la dificultad de mantener dicho nivel. El periodista argumentó que el fútbol no siempre es justo y que el resultado de una final no siempre premia al mejor proceso. Para el comentarista, la consistencia táctica y la disciplina del equipo tolimense fueron los elementos más destacados de toda la vigencia deportiva actual. No obstante, lamentó que la estructura del torneo colombiano, basada en fases de eliminación directa, termine por castigar a los equipos regulares. La crítica apunta a un sistema que suele favorecer a clubes que llegan con rachas cortas de éxito a las instancias definitivas. La superioridad numérica del Tolima es, para Londoño, una verdad matemática irrefutable que trasciende el marcador de un partido único.
En su intervención, el periodista comparó el sistema de competición local con los formatos utilizados en las grandes ligas del continente europeo. Aseguró que, de jugarse bajo un sistema de “todos contra todos” y premiar la regularidad, el Deportes Tolima tendría hoy más de diez estrellas. Este análisis pone en duda la equidad del formato de “playoffs” que impera en Colombia, donde el esfuerzo de un año se juega en noventa minutos. Londoño criticó que equipos acostumbrados a vivir de rachas cortas o “chispazos” logren títulos que, en ligas de largo aliento, serían imposibles de alcanzar. La falta de un modelo que valore el desempeño anual integral es, según su visión, una de las grandes falencias del balompié nacional. Esta perspectiva ha resonado profundamente en la hinchada tolimense, que siente haber sido la gran protagonista de la temporada.
[Image: Graphics comparing Deportes Tolima’s 96 points with the average scores of previous Colombian league champions]
El analista también lanzó dardos contra los equipos que, según sus palabras, han dependido históricamente de “empujones arbitrales” o situaciones de fortuna momentánea. Para Londoño, estos clubes hoy tendrían muchas menos estrellas en su palmarés si el rendimiento se midiera por la calidad constante del juego. La regularidad del Deportes Tolima es presentada como el antídoto contra el fútbol de rachas y las decisiones polémicas que a veces definen finales. El respeto y el aplauso hacia el proceso liderado por el equipo de Ibagué debe ser, para el periodista, un consenso en la opinión pública. La historia del fútbol puede ser injusta en sus palmarés, pero los registros estadísticos permanecen como el testimonio fiel de la realidad deportiva. El debate sobre qué debe pesar más, si la corona o los puntos, queda abierto tras sus fuertes declaraciones.
La consistencia y el trabajo duro fueron los pilares que Londoño rescató de la campaña del club presidido por César Camargo en este año. Afirmó que, aunque el trofeo no repose en las vitrinas de Ibagué, el estatus de “mejor equipo” les pertenece por derecho propio de juego. Este reconocimiento busca dignificar la labor de futbolistas y cuerpo técnico que dominaron la tabla de reclasificación de principio a fin del calendario. Para el comunicador, el mérito deportivo no debe reducirse exclusivamente a la obtención de un título, sino a la construcción de una identidad. El Deportes Tolima ha demostrado que es una potencia que compite de igual a igual contra los denominados equipos grandes del país. Sus 96 puntos son vistos como una hazaña de gestión deportiva que pocos clubes podrán igualar en el futuro cercano.
Finalmente, el periodista cerró su análisis con una frase lapidaria: “La historia no siempre es justa… pero los números no mienten”. Con este postulado, Londoño invitó a los aficionados a valorar la profundidad de los procesos por encima de los resultados circunstanciales de una final. El Tolima cierra el año como el líder indiscutible en rendimiento, dejando una vara muy alta para la competencia en la próxima temporada. La reflexión del periodista invita a repensar si el formato del fútbol colombiano debe evolucionar hacia modelos que premien la justicia deportiva. Por ahora, el cuadro ‘Pijao’ se queda con el honor de haber sido el equipo más sólido de Colombia en el 2025. El debate sobre la estrella frente a la regularidad seguirá siendo el centro de la polémica futbolística en las próximas semanas.









