Propietarios y conductores del transporte público protagonizan una jornada de protesta frente al Palacio Municipal, denunciando incumplimientos del Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP) y retrasos en los pagos acordados hace más de dos años.
La mañana de este lunes, varios conductores y propietarios de busetas del transporte público de Ibagué se encadenaron frente a la Alcaldía municipal en señal de protesta contra el Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP). Los manifestantes reclaman el incumplimiento de acuerdos económicos y la falta de inversión en las vías de la ciudad, en un contexto marcado por el inconformismo y la desconfianza hacia la administración local.
De acuerdo con los testimonios de los transportadores, el conflicto se origina en el proceso de modernización del parque automotor, donde el SETP habría comprometido pagos a los propietarios de busetas que fueron retiradas de circulación. Sin embargo, más de dos años después, muchos de ellos afirman no haber recibido el dinero acordado, lo que los obligó a pasar de ser pequeños empresarios a empleados conductores.
“Lo único que ha hecho el SETP es gastarse más de 3 mil millones de pesos en contratos y burocracia. No cumplen sus acuerdos y no se ve el progreso”, expresó uno de los manifestantes durante una entrevista en el medio local Alerta Tolima, mientras sostenía una cadena como símbolo de su protesta.
Los transportadores también denunciaron que el proyecto del SETP se ha convertido en un “negocio rentable para la Alcaldía”, pues, según ellos, los recursos nacionales que llegan para mejorar el transporte urbano se destinan principalmente a gastos administrativos, dejando de lado la inversión en infraestructura vial.
El mal estado de las calles en varios barrios de la ciudad es otro de los puntos críticos que motivan la protesta. Los conductores aseguran que sus vehículos sufren daños constantes por los huecos y la falta de mantenimiento, sin que haya una respuesta efectiva por parte de la administración municipal.
La manifestación ocurre a pocos días de celebrarse el aniversario de la capital tolimense, y algunos líderes del gremio señalaron con ironía que “el cumpleaños de Ibagué será con paro de busetas”, haciendo referencia a que la movilización había sido programada desde hace meses ante el incumplimiento de los compromisos por parte del SETP.
Entre tanto, se espera que la alcaldesa Johana Ximena Aranda llegue al lugar para establecer un diálogo pacífico con los manifestantes y buscar una salida concertada al conflicto. Sin embargo, los transportadores advirtieron que mantendrán la protesta hasta recibir garantías concretas de pago y compromisos reales de inversión.
El paro de busetas ha generado preocupación entre los usuarios del transporte público, quienes temen afectaciones en la movilidad durante los próximos días. Mientras tanto, el llamado de los manifestantes sigue siendo el mismo: que el SETP cumpla con lo prometido y se priorice la dignificación del trabajo de los conductores en la capital tolimense.