La reunión contó con la participación de funcionarios de la Gobernación y alcaldes de la zona de influencia del volcán, quienes discutieron estrategias preventivas y protocolos de respuesta ante una posible emergencia.
El Servicio Geológico Colombiano emitió un informe que alerta sobre más de 600 sismos registrados en la región, incluyendo un temblor de magnitud máxima de 3.9 grados. A pesar de estos eventos, el volcán se mantiene en estado de alerta Amarilla, indicando una menor inestabilidad pero aún con potencial riesgo.
La gobernadora Matiz destacó la importancia de desplegar acciones preventivas para salvaguardar la seguridad de las poblaciones en la zona de influencia del volcán. Durante la reunión, se abordaron temas relacionados con la coordinación de esfuerzos entre entidades gubernamentales y locales, así como la necesidad de contar con protocolos claros de respuesta ante posibles escenarios de emergencia.
Andrea Mayorquín, directora de Gestión del Riesgo de Desastres de la Gobernación del Tolima, enfatizó la relevancia de la preparación en un territorio con actividad volcánica. Se resaltó la importancia de socializar entre la comunidad rutas de evacuación, puntos de encuentro y directorios telefónicos de los consejos municipales de gestión del riesgo.
“Somos un territorio de volcanes, debemos estar siempre preparados. Invitamos a los 14 municipios del área de influencia del volcán a compartir con la comunidad este protocolo de respuesta para que puedan socializar cuáles son las rutas de evacuación, los puntos de encuentro y los directorios telefónicos de estos consejos municipales”, afirmó Mayorquín.
Las autoridades subrayaron la necesidad de una cooperación efectiva entre instituciones y la comunidad para enfrentar posibles eventos volcánicos. Se espera que estas acciones preventivas refuercen la capacidad de respuesta ante cualquier eventualidad relacionada con la actividad del Nevado del Ruiz.