El sector turístico del Tolima enfrenta una crisis debido a los bloqueos viales generados por el paro arrocero. La Gobernación del departamento advierte sobre el impacto en la movilidad y la economía local, mientras empresarios reportan una drástica disminución de visitantes.
La Gobernación del Tolima, a través de su secretario de Cultura y Turismo, Alexander Castro, ha manifestado su preocupación por la crisis que atraviesa el sector turístico del departamento a causa del paro arrocero. Los bloqueos en las principales vías han reducido drásticamente el flujo de visitantes, afectando la economía de municipios con vocación turística como Melgar, Carmen de Apicalá, Prado e Ibagué.
Las manifestaciones de los arroceros, que ya completan dos semanas sin avances en las negociaciones con el Gobierno Nacional, han intensificado las restricciones en el tránsito. Desde este lunes, los bloqueos en puntos estratégicos como Gualanday se han extendido entre cuatro y seis horas diarias, lo que limita el acceso de turistas y genera pérdidas económicas significativas en hoteles, restaurantes y otros establecimientos del sector.
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Ante este panorama, el secretario Alexander Castro hizo un llamado urgente al Gobierno Nacional para intervenir de manera inmediata en la crisis: “Hoy el departamento está en crisis en materia turística. Hemos tenido semanas de desocupación en municipios clave. La falta de respuesta del Gobierno Nacional está poniendo en riesgo la sostenibilidad del sector turístico del Tolima”.
La Gobernación ha reiterado su respaldo a los empresarios y prestadores de servicios turísticos, destacando los esfuerzos por visibilizar esta problemática y buscar soluciones que mitiguen sus efectos. A su vez, se ha instado al Gobierno Nacional a establecer un diálogo efectivo con los manifestantes para garantizar la movilidad y evitar mayores afectaciones económicas.
Entre los puntos más críticos de bloqueo se encuentran Saldaña, el cruce Armero-Líbano y la intersección Chicoral-Bogotá-Ibagué, zonas clave para el tránsito de viajeros hacia destinos turísticos del departamento. Ante esta situación, las autoridades han recomendado a los viajeros buscar rutas alternas y mantenerse informados sobre el estado de las vías.
La crisis turística en el Tolima evidencia la interdependencia entre distintos sectores de la economía regional, donde el agro y el turismo se ven mutuamente afectados. Empresarios y líderes del sector han advertido que, de no resolverse el paro en el corto plazo, el impacto podría ser devastador para cientos de familias que dependen del turismo como fuente principal de ingresos.
La Gobernación del Tolima reafirma su compromiso con la reactivación económica y la defensa de los derechos del sector turístico, al tiempo que insiste en la necesidad de que el Gobierno Nacional intervenga con prontitud para lograr una solución que garantice tanto el bienestar de los arroceros como la estabilidad económica del departamento.
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