Habitantes del sector Caribana aseguran que, tras una intervención del IBAL hace más de un mes, la filtración de agua persiste, generando encharcamientos continuos desde el barrio El Bunde hasta el puente del Topacio. Piden solución urgente.
A través de denuncias ciudadanas recogidas por LAOTRAVERDAD.CO, residentes del sector Caribana, en la calle 96 con carrera Quinta de Ibagué, alertaron sobre una grave fuga de agua que, pese a haber sido intervenida por el IBAL hace más de un mes, sigue activa y generando encharcamientos en la vía pública. La situación se ha extendido hasta el puente del barrio Topacio, provocando malestar y riesgos para la movilidad peatonal y vehicular.
Según los testimonios, el equipo del IBAL realizó una intervención en la red de acueducto aproximadamente hace cinco semanas. Sin embargo, la filtración reapareció pocos días después. “Supuestamente repararon, pero a los 10 o 15 días ya se volvió a inundar. Hay un reguero desde ese punto hasta el puente del Topacio y nadie ha regresado a solucionar”, aseguró un habitante afectado.
Los residentes han reportado que el agua corre de forma constante, con mayor intensidad en las noches. “Esa agua se está botando 24/7, especialmente desde las 7:00 p.m. Es increíble que con el problema de escasez en otras zonas, acá se pierda tanta agua limpia sin que nadie responda”, indicó un comerciante de la zona.
Además de los inconvenientes sanitarios, los habitantes expresan preocupación por el desperdicio del recurso hídrico y los posibles daños a la infraestructura vial. “La vía se está deteriorando y nadie da una solución definitiva. Ya estamos pensando en realizar una protesta o acudir a medios nacionales”, dijeron voceros de la comunidad.
Habitantes del sector se intentó contactar con el IBAL para conocer de forma oficial sobre esta denuncia. Hasta el momento, no se ha obtenido respuesta formal de la entidad.
Los ciudadanos reiteran su llamado a la Alcaldía de Ibagué y a la gerente del IBAL, Erika Palma, para que tomen cartas en el asunto y se resuelva de forma definitiva esta fuga que, además de representar un desperdicio de agua potable, pone en evidencia fallas en la calidad de las obras realizadas.