Un deslizamiento de tierra ocurrido recientemente ha provocado el desplome de la vía Tapias, la única ruta de acceso a varias veredas de la zona rural de Ibagué, dejando a sus habitantes completamente incomunicados. En un video capturado por un residente, se puede observar el momento exacto en que la carretera se viene abajo, subrayando la urgencia de la situación.
El deslizamiento afectó gravemente la vía Tapias, que es la única ruta de acceso para las veredas Tapias, Toche, Catayma, Cataymita, El Ingenio y San Simón. Los residentes de estas áreas rurales dependen completamente de esta carretera para llegar a Ibagué y han quedado totalmente aislados debido al derrumbe.
Una habitante de la zona afectada expresó su preocupación: “Sí señor, eso fue hace rato para la vía Tapias, que quedaron sin carretera. Entonces, si nos hacían el favor de ayudarnos ahí en la emisora, en la noticia, a ver si de pronto la gobernación, la alcaldía nos colaborara con arreglar la vía o mirar por dónde sacamos ahí para que haya paso porque quedaron incomunicados.”
La comunidad ha hecho un llamado urgente a las autoridades gubernamentales del municipio y el departamento para que solucionen el problema de la vía y restablezcan el acceso a la ciudad. La intervención con maquinaria y recursos necesarios es vital para reparar la vía y restablecer la comunicación. Este acceso es crucial no solo para el transporte de personas, sino también para el abastecimiento de bienes y servicios esenciales para los residentes de las veredas afectadas.
El deslizamiento de tierra no solo ha dejado a los residentes sin una ruta de acceso, sino que también ha afectado gravemente su vida diaria. Sin la carretera, los habitantes no pueden acceder a servicios médicos, educación, ni realizar actividades comerciales necesarias para su sustento.

El gobierno local ha sido informado del incidente, y la comunidad espera una respuesta rápida y efectiva. La reparación de la vía Tapias es esencial para evitar mayores inconvenientes y asegurar que los residentes puedan reanudar sus actividades cotidianas sin más interrupciones.
Las autoridades están evaluando la situación y se espera que pronto dispongan de maquinaria y personal para comenzar los trabajos de reparación. La comunidad, mientras tanto, sigue esperando con esperanza que las promesas de asistencia se conviertan en acciones concretas que alivien su aislamiento y aseguren su bienestar.











