Renzo García y Beto Coral protagonizan una disputa en Twitter por la opinión de este último sobre la encuesta realizan los precandidatos de los partidos verdes, liberal e independiente Ecologista Colombiano en Ibagué. Coral afirma que la encuestadora utilizada no está acreditada por el Consejo Nacional Electoral (CNE), lo que genera molestia en García.
García defiende la encuesta como un sondeo interno que no tiene relación con el candidato del Pacto Histórico, es decir, Marco Emilio Hincapié. Asegura que la persona encargada del sondeo es amiga de los tres precandidatos y cuenta con experiencia y estudios demostrados. Coral, por su parte, insiste en que el dueño de la encuestadora de Juan Pablo Yáñez, es amigo de uno de los candidatos y lo acusa de haber obtenido un cargo gracias a esa relación.
La disputa entre ambos continúa, con Coral llamando a García a no ser infantil y este último pidiendo argumentos fundamentados para considerar la encuesta como suspicaz y espuria. García también cuestiona el interés de descalificar un mecanismo interno que no los vincula directamente a ellos, es decir, al Pacto Histórico y al precandidato Marco Emilio Hincapié.
“Le invito a investigar las acciones concretas que hemos desarrollado contra el Clan Barreto y verán de q/ lado está la coherencia. Le propongo un debate abierto y público sobre ese asunto con su candidato, para que la ciudadanía conozca quién es quién. Puedes moderar la discusión”, expresó García en otro twitt a modo de respuesta a Coral, y agregó en la discusión “te invito a que indagues porque quieren armar lista cerrada del PH a la Asamblea Departamental (Tolima) y conozcas quién va a encabezar la misma. Espero que su periodismo tenga bases argumentales de peso y no los comentarios sueltos de quienes desconocen acuerdos e incumplen la palabra”.
Finalmente, esta confrontación en redes sociales evidencia las tensiones y diferencias entre los precandidatos en Ibagué, así como la importancia de la transparencia en los procesos electorales. Queda abierto el espacio para un debate amplio sobre las acciones de los candidatos y la necesidad de argumentos sólidos en las discusiones políticas. Además, pone en evidencia la necesidad de contar con encuestadoras acreditadas por el CNE para garantizar la transparencia en las mediciones de preferencias políticas.