La madrugada de este domingo, 19 de mayo, fue particularmente agitada para muchos colombianos debido a dos sismos que se sintieron con fuerza en varias localidades. El Servicio Geológico Colombiano reportó que ambos movimientos telúricos tuvieron como epicentro Angostura, Antioquia, y se sintieron con intensidad en Medellín, Yarumal y otros municipios cercanos.
El primer sismo ocurrió a las 2:20 a.m. y tuvo una magnitud de 3.8 grados en la escala de Richter, con una profundidad de 52 kilómetros. Este temblor, localizado a 4 km de Angostura, fue seguido dos minutos después por otro movimiento de magnitud 3.3 y una profundidad superficial de menos de 30 kilómetros. Ambos eventos generaron preocupación entre los residentes, muchos de los cuales compartieron sus experiencias a través de redes sociales.
Debido a la ubicación geográfica de Colombia, el país está sujeto a actividad sísmica constante. Aunque la mayoría de los sismos son de baja magnitud y suelen pasar desapercibidos, estos eventos en particular fueron lo suficientemente fuertes como para despertar a muchas personas en la madrugada, generando alarma y recordando la importancia de estar preparados para este tipo de situaciones.
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La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han reiterado las recomendaciones sobre cómo actuar durante un temblor. Se aconseja alejarse de objetos de vidrio, estantes y muebles grandes que puedan caer. Además, es importante protegerse la cabeza y el rostro en caso de caída de escombros y evitar correr o salir desesperadamente del edificio durante el sismo.
En caso de encontrarse en la cocina, se debe apagar la estufa y buscar refugio de inmediato. Si el sismo ocurre mientras se está en la cama, lo más seguro es permanecer allí y protegerse con una almohada, evitando moverse y exponerse a vidrios rotos en el suelo.
El Servicio Geológico Colombiano sigue monitoreando la actividad sísmica en la región para detectar posibles réplicas. Aunque no se reportaron daños significativos ni víctimas tras estos eventos, la comunidad debe mantenerse informada y preparada para futuras eventualidades.
Las autoridades locales, junto con la UNGRD, han iniciado campañas de sensibilización para recordar a la población las medidas de seguridad y los protocolos a seguir durante y después de un sismo. Estas iniciativas son cruciales para minimizar el riesgo de accidentes y mejorar la respuesta ante emergencias sísmicas.
Colombia, dada su actividad sísmica constante, debe estar en alerta permanente y la ciudadanía debe estar educada sobre cómo actuar ante estos fenómenos naturales. Los recientes temblores son un recordatorio de la importancia de la prevención y preparación en materia de desastres.