La embajada de Estados Unidos en Colombia aún no restablecerá la emisión de citas para visas, a pesar de que el gobierno de Gustavo Petro aceptó los términos de la política migratoria impuesta por la administración de Donald Trump. Washington ha condicionado la reapertura de la sección de visas a la llegada exitosa del primer avión con deportados colombianos.
El Departamento de Estado confirmó que “las sanciones de visas y las inspecciones intensificadas en aeropuertos seguirán vigentes hasta que se complete el primer retorno exitoso de migrantes colombianos”. Esta medida forma parte de la presión ejercida por Estados Unidos sobre el gobierno colombiano, luego de que inicialmente se negara a recibir vuelos con deportados.
La incertidumbre ha afectado a cientos de ciudadanos colombianos que tenían programadas sus citas para solicitar la visa. Laura Mora, una de las afectadas, expresó su frustración tras haber esperado dos años para su entrevista. “Necesito viajar porque estoy pendiente de un familiar de la tercera edad con problemas de salud. Esto me afecta profundamente”, manifestó.
Algunos solicitantes, a pesar del anuncio de la embajada, se acercaron el lunes 27 de enero a la sede diplomática en Bogotá con la esperanza de recibir información más clara sobre el proceso. Sin embargo, las autoridades estadounidenses han reiterado que hasta que no se cumpla la condición establecida, no habrá cambios en las restricciones.
Mora, quien ha invertido más de dos millones de pesos en el trámite, criticó al presidente Gustavo Petro por lo que considera una falta de responsabilidad en sus decisiones. “No entiende el impacto que tienen sus palabras y decisiones en los ciudadanos”, afirmó.
El gobierno colombiano, por su parte, anunció que ha superado el impasse diplomático con Washington, pero aún no ha dado detalles sobre la logística para el retorno de los deportados. Se espera que en los próximos días se realicen nuevas negociaciones para definir la fecha del primer vuelo de repatriación.
Mientras tanto, quienes esperaban obtener su visa continúan en la incertidumbre. La suspensión de citas no solo afecta a quienes buscan viajar por razones familiares o de turismo, sino también a estudiantes y empresarios que dependen de estos documentos para sus actividades en Estados Unidos.
Se espera que la situación se resuelva en las próximas semanas, dependiendo del cumplimiento de los acuerdos entre ambos gobiernos. Sin embargo, el episodio ha dejado en evidencia la fragilidad de las relaciones bilaterales y la presión que Washington ejerce en temas migratorios.