En menos de 24 horas, el Ejército Nacional ha sido blanco de dos ataques por parte del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en el departamento de Arauca, intensificando el clima de tensión en la región. La tarde del domingo 24 de noviembre, el grupo armado lanzó explosivos contra la Base Militar de la Holanda, ubicada en el corregimiento de Puerto Jordán, municipio de Arauquita.
Según reportes preliminares, aunque no se registraron heridos en este último ataque, el incidente generó enfrentamientos entre las tropas militares y los atacantes, mientras se desplegaban operativos de seguridad para asegurar la zona. Este hecho se suma a un atentado perpetrado la noche anterior en el mismo municipio, cerca del Aeropuerto Nacional Los Colonizadores en Saravena.
El ataque del sábado, 23 de noviembre, involucró la detonación de dos artefactos explosivos cerca de unidades militares y la terminal aérea, dejando como resultado un vigilante herido. Este hecho alertó a la comunidad y provocó una rápida reacción de las fuerzas armadas para contener la situación y proteger a los civiles.
El general Luis Emilio Cardozo, comandante del Ejército Nacional, señaló que estos ataques son parte de una escalada de violencia por parte del ELN tras el término del cese al fuego bilateral. Según el alto oficial, el grupo armado ha intensificado el uso de explosivos, francotiradores y minas antipersonales contra las tropas encargadas de proteger activos estratégicos del Estado y a la población civil.
“El ELN vuelve a sus prácticas habituales de terrorismo, lanzando explosivos contra unidades militares y utilizando tácticas que ponen en riesgo a la población. Seguimos trabajando para neutralizar estas acciones y garantizar la seguridad en la región”, afirmó el general Cardozo.
Estos ataques no solo reflejan el deterioro de las condiciones de seguridad en Arauca, sino también el desafío que enfrenta el Gobierno Nacional en sus esfuerzos por mantener el orden público y proteger a las comunidades en zonas de alta presencia de grupos armados ilegales.
La comunidad de Arauquita y Saravena ha expresado su preocupación ante el aumento de los enfrentamientos, que ponen en riesgo la vida de los civiles y dificultan la movilidad en la región. Los líderes locales han solicitado una mayor presencia del Estado y la implementación de medidas que mitiguen el impacto de la violencia en las zonas rurales.
Mientras las operaciones militares continúan en el área, las autoridades hacen un llamado al ELN para cesar las hostilidades y respetar a la población civil, recordando la importancia de buscar soluciones pacíficas a través del diálogo.