La transición de poder en El Espinal ha tomado un giro inesperado con la retención de la sede de la Alcaldía por parte del exalcalde Juan Carlos Tamayo, impidiendo al nuevo mandatario, Wilson Gutiérrez, acceder a su despacho. A pesar de la fecha acordada para la entrega oficial, el conflicto persiste y genera tensiones en el municipio.
Gutiérrez, recién posesionado alcalde, expresó su frustración al verse imposibilitado de ingresar a la Alcaldía para comenzar sus funciones. Según el relato del nuevo mandatario, Tamayo informó que la entrega oficial se realizaría a partir del 2 de enero, alegando la falta de posesión de sus funcionarios como justificación para la demora.
En medio de esta situación, Gutiérrez se vio obligado a despachar desde el comando de la Policía en El Espinal, utilizando una de las oficinas disponibles en el lugar. La falta de acceso a la sede municipal ha generado preocupación y malestar, afectando el normal desarrollo de las labores administrativas.
El alcalde Gutiérrez destacó que la retención de la Alcaldía representa una extralimitación de funciones y constituye un obstáculo ilegal para el inicio de su gestión. La situación ha llamado la atención de la comunidad y de otros líderes políticos en la región.
Sin embargo, la incertidumbre persiste en torno al acceso a la sede municipal y la normalización de las actividades gubernamentales. Este episodio subraya la importancia de un proceso de transición claro y colaborativo, evidenciando la necesidad de garantizar una transferencia de poder suave y respetuosa para asegurar la continuidad en la gestión gubernamental.