El aspirante a la Alcaldía de Melgar, Francisco “Pacho” Bermúdez, habría incurrido en una inhabilidad al ser electo como concejal para el mismo periodo constitucional 2024–2027, lo cual podría invalidar su actual candidatura en las elecciones.
La candidatura de Francisco “Pacho” Bermúdez a la Alcaldía de Melgar enfrenta serios cuestionamientos legales. Según expertos en derecho electoral, el aspirante estaría inhabilitado debido a que fue electo concejal del municipio para el periodo 2024–2027, en virtud del Estatuto de Oposición (Ley 1909 de 2018), lo cual le impide aspirar a otro cargo de elección popular en el mismo periodo.
Bermúdez ocupó el segundo lugar en las elecciones territoriales de octubre de 2023. De acuerdo con la ley de oposición, ese resultado le otorgó una curul automática en el Concejo Municipal. Sin embargo, ahora busca competir en las elecciones atípicas para la Alcaldía de Melgar, lo que podría constituir una violación directa a la normatividad vigente.
El artículo 280 del Código Electoral y el artículo 30 de la Ley 617 de 2000 son claros al establecer que ninguna persona puede ser elegida para más de un cargo de elección popular en el mismo periodo constitucional. Este principio busca evitar acumulación de poder y proteger la integridad del sistema democrático.
Además, la jurisprudencia del Consejo de Estado ha sido reiterativa: la inhabilidad se configura desde el momento de la elección, no a partir de la posesión ni del ejercicio del cargo. Es decir, aunque Bermúdez no haya asumido formalmente como concejal, su elección en ese rol ya lo inhabilita para postularse como alcalde en el mismo periodo.
En este sentido, la posible candidatura de Bermúdez genera incertidumbre jurídica, pues su postulación podría ser objeto de una demanda de nulidad electoral en caso de resultar elegido. Esto pondría en entredicho la validez de la elección y afectaría la gobernabilidad del municipio.
La situación se agrava si se tiene en cuenta que la elección atípica busca superar una crisis institucional en Melgar. Por lo tanto, cualquier irregularidad podría traducirse en un nuevo conflicto legal y administrativo, con implicaciones para la legitimidad del próximo gobierno local.
Expertos coinciden en que esta situación debe ser evaluada de forma inmediata por las autoridades electorales y organismos de control. Permitir una candidatura inhabilitada no solo es ilegal, sino que podría generar un daño institucional irreparable en el municipio.
El llamado es a actuar con responsabilidad jurídica y política. Aunque la aspiración de Bermúdez pueda tener respaldo popular, el respeto por la legalidad debe prevalecer para evitar futuras controversias y garantizar elecciones limpias y transparentes.
De no tomarse decisiones oportunas, el municipio podría enfrentar la anulación del proceso, lo cual supondría costos económicos y políticos innecesarios. La inhabilidad es objetiva y debe ser valorada con rigor, sin interpretaciones políticas ni personales.
Por ahora, el Consejo Nacional Electoral y otras autoridades competentes tienen la responsabilidad de esclarecer la situación, determinar la legalidad de la candidatura y evitar que Melgar vuelva a caer en una crisis institucional por errores que pueden prevenirse con anticipación.
Nota: El equipo de campaña de Bermúdez expresó que la inhabilidad es falsa y que todo se trata de una jugada política para desestabilizar los ánimos con la candidatura del líder político.