Adriana Magali Matiz hizo un llamado urgente desde Rovira al alto Gobierno para que deje atrás el discurso y cumpla los compromisos asumidos con los productores de arroz, ante el inminente inicio de un paro indefinido por el bajo precio de compra y el incumplimiento de los acuerdos firmados en marzo.
Durante una visita al municipio de Rovira, la gobernadora del Tolima, Adriana Magali Matiz, expresó con firmeza su respaldo a los productores de arroz del departamento y exigió al Gobierno Nacional el cumplimiento de los compromisos pactados tras el levantamiento del paro arrocero ocurrido en marzo.
En su discurso, Matiz advirtió que el sector arrocero atraviesa una profunda crisis, y que, de no obtener respuestas prontas y efectivas, se iniciará un nuevo paro nacional indefinido. “Hoy los arroceros están al borde de la quiebra. No es justo que les paguen una carga de arroz a $170.000 cuando producirla cuesta $205.000. Esa pérdida no la puede seguir asumiendo el campesinado”, afirmó con tono enérgico.
La mandataria regional confirmó su participación el próximo lunes en la Gran Mesa Nacional convocada por los gobernadores de los departamentos productores de arroz. Allí, junto al Ministerio de Agricultura, se abordará la situación crítica del sector y se exigirá una solución de fondo. “Desde el Tolima le decimos al Gobierno: pasen del discurso al cumplimiento”, reiteró.
Matiz también resaltó los esfuerzos de su administración por apoyar al sector. “Nosotros sí les estamos cumpliendo. Ya hicimos convenio con Finagro para que la tasa de interés en sus créditos sea prácticamente cero. Estamos destinando recursos para la adecuación de los distritos de riego. Pero necesitamos reciprocidad del Gobierno Nacional”, indicó.
Entre los compromisos incumplidos que la gobernadora reclamó están la regulación de la Tasa de Uso de Agua, el control de precios en los fertilizantes y una política clara de comercialización que garantice precios justos para el productor. “No más falsas promesas. El campo no aguanta más”, sentenció.
La situación ha generado una creciente indignación entre los arroceros del Tolima, el segundo departamento productor de arroz en Colombia. Los líderes gremiales aseguran que no han recibido lo prometido por el Gobierno Nacional, lo que ha llevado a que se organicen bloqueos y protestas en distintas regiones del país.
Matiz aprovechó la ocasión para enviar un mensaje directo a los campesinos: “No están solos. Este Gobierno Departamental está de su lado. Seguiremos luchando por que se respeten sus derechos y por garantizar que sus productos tengan un precio justo en el mercado”.
Finalmente, recordó que su gestión no se limita al arroz. Destacó que en septiembre se colocará la primera piedra del primer Centro Agroindustrial del Café en Ibagué, proyecto concertado con la Federación Nacional de Cafeteros. “Esto también es desarrollo rural. Seguimos trabajando por todos los sectores del campo tolimense”, concluyó.
El llamado de la gobernadora se suma a los de otros mandatarios locales que también han alzado su voz ante lo que consideran una grave omisión del Estado. La tensión crece y el país observa con atención la cumbre de este lunes, de la que podría depender la continuidad o el levantamiento de la nueva jornada de paro.