En un impactante giro en el panorama político colombiano, Nicolás Fernando Petro Burgos, hijo del presidente Gustavo Petro, y su exesposa, Daysuris del Carmen Vásquez Castro, han sido capturados por el CTI de la Fiscalía, acusados de lavado de activos, enriquecimiento ilícito y violación de datos personales. La noticia fue anunciada a través de un comunicado oficial emitido por la Fiscalía General de la Nación, y ha generado conmoción y debate en el país.
Según el informe, la captura se llevó a cabo en cumplimiento a órdenes de arresto emitidas por el Juzgado 16 Penal Municipal con Función de Control de Garantías de Bogotá. Los delitos que enfrentan estarían relacionados con hechos ocurridos desde 2022 hasta la fecha actual. Los capturados serán presentados ante un juez penal municipal con función de control de garantías para enfrentar las imputaciones y solicitudes de medidas restrictivas de la libertad.
La noticia llega poco después de la entrevista concedida por Day Vásquez, exesposa de Nicolás Petro, a la revista SEMANA. En dicha entrevista, Day señaló que su expareja habría recibido cuantiosas sumas de dinero de fuentes cuestionables. Entre ellas, se mencionan 600 millones de pesos provenientes del exnarcotraficante Santander Lopesierra, alias “Hombre Marlboro”, y otros 400 millones de pesos del hijo de una figura controvertida conocida como “Turco Hilsaca”. Estos recursos, supuestamente destinados a la campaña presidencial de Gustavo Petro, habrían sido utilizados por Nicolás para la adquisición de una lujosa vivienda en Barranquilla.
Ante la noticia de la captura de su hijo, el presidente Gustavo Petro expresó su profundo dolor como padre y su preocupación por la situación. A través de su cuenta de Twitter, el mandatario afirmó que permitirá que la Fiscalía proceda de acuerdo con la ley y aseguró que no intervendrá ni presionará en el proceso judicial. Además, envió sus deseos de fortaleza a Nicolás para enfrentar las consecuencias de sus actos y reflexionar sobre sus errores.
El escándalo ha sacudido al ámbito político colombiano, y la ciudadanía espera que las investigaciones se desarrollen con total transparencia e imparcialidad. Se espera que el caso arroje luz sobre las acusaciones y permita esclarecer la verdad detrás de los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito que se le imputan a Nicolás Petro y su exesposa.
Aunque el presidente Petro ha mostrado su disposición a cooperar con las autoridades, el caso sigue siendo un tema delicado en la esfera política del país. La opinión pública espera respuestas y justicia en este caso que ha puesto bajo los reflectores a la familia presidencial y ha generado un debate sobre la responsabilidad y transparencia de los funcionarios públicos.