El 14 de abril de 1935, el fotógrafo alemán Horst Martin capturó imágenes de Ibagué durante el Domingo de Ramos. Estas fotografías, recientemente restauradas y coloreadas, ofrecen una visión única de la vida urbana, el comercio y las costumbres religiosas de la ciudad en esa época.
El 14 de abril de 1935, en pleno Domingo de Ramos, el fotógrafo alemán Horst Martin llegó a Ibagué. Con su cámara, inmortalizó escenas cotidianas que hoy nos permiten viajar al pasado y entender cómo era la vida en la capital del Tolima hace casi un siglo.
Las imágenes muestran una ciudad activa y dinámica, con calles llenas de comerciantes, transeúntes y vehículos. Se pueden observar almacenes como el de Pedro Luis Álvarez, la Sastrería Ríos, la Peluquería Republicana y la Droguería Julio Delgado, entre otros. Estos comercios eran el corazón económico de Ibagué en esa época.
La Semana Santa era una festividad importante para los ibaguereños. Las calles se llenaban de personas en procesión, portando hojas de palma, en una manifestación de fe y tradición. Sin embargo, también se registraron momentos de tensión, como el arresto de un artista callejero por parte de la policía, lo que refleja las normas sociales y el control del orden público de la época.
El transporte en Ibagué en 1935 era una mezcla de lo tradicional y lo moderno. Las “chivas”, vehículos adaptados para el transporte de personas y mercancías, circulaban por las calles, mostrando el dinamismo del comercio local. Además, las primeras señales de modernización eran evidentes, con anuncios publicitarios de productos como Cafiaspirina, Vermífugo San Antonio y Cerveza Águila en las fachadas de los comercios.
La infraestructura urbana también estaba en proceso de mejora. Se observan trabajos de mantenimiento en las calles, con la instalación o arreglo de tuberías y alcantarillado, lo que indica un esfuerzo por modernizar la ciudad y mejorar las condiciones de vida de sus habitantes.
Estas fotografías no solo son valiosas por su contenido visual, sino también por lo que representan: una ciudad en transformación, en la que se mezclan la tradición y la modernidad, la fe y el progreso. Son testigos de una época que, aunque lejana, sigue viva en la memoria colectiva de los ibaguereños.
Actualmente, estas imágenes se encuentran en el Museo de Etnología de Dresde, Alemania, y han sido restauradas y coloreadas por el profesor Johann Sebastián Letrado van Arcken, docente de la Universidad Nacional de Colombia. Su trabajo ha permitido que los ibaguereños y el mundo entero puedan apreciar y valorar este patrimonio visual.
La restauración digital de estas fotografías ha sido posible gracias a la colaboración entre instituciones colombianas y alemanas, lo que demuestra el interés por preservar y difundir la historia y cultura de Ibagué.
Estas imágenes ofrecen una oportunidad única para reflexionar sobre el pasado y cómo ha evolucionado Ibagué a lo largo de los años. Nos invitan a valorar nuestra historia, nuestras tradiciones y a reconocer el esfuerzo de quienes han contribuido al desarrollo de nuestra ciudad.
En un mundo cada vez más digitalizado, es importante recordar y preservar nuestras raíces. Las fotografías de Horst Martin son un recordatorio de que, aunque el tiempo pase, la esencia de Ibagué sigue viva en sus calles, en su gente y en su historia.