La empresa se vio obligada a trasladar sus operaciones ante la imposibilidad de encontrar una solución dentro del marco normativo vigente.
La reconocida empresa Industrias Murelli ha confirmado su salida de Ibagué tras no encontrar una alternativa viable para continuar sus operaciones en la ciudad. La decisión, según la Cámara de Comercio de Ibagué (CCI), responde a las restricciones impuestas por el Plan de Ordenamiento Territorial (POT), que impidieron una solución favorable para la compañía.
Carlos Enciso, presidente ejecutivo de la CCI, explicó que se llevaron a cabo varias reuniones entre el empresario Jairo Acosta, representantes del gremio y el gobierno local para evaluar posibles alternativas. Sin embargo, las limitaciones normativas no permitieron llegar a un acuerdo que garantizara la permanencia de la empresa.
Enciso también señaló que la falta de flexibilidad en las regulaciones urbanísticas representa un riesgo para la inversión empresarial en Ibagué. Ante esta situación, el dirigente gremial hizo un llamado a las autoridades para revisar y ajustar las normativas, con el fin de evitar que más empresas enfrenten dificultades similares.
La salida de Murelli no solo representa una pérdida económica para la ciudad, sino que también genera preocupación en el sector empresarial, que ve con inquietud cómo las restricciones del POT pueden afectar la competitividad de la región. La CCI ha advertido que es necesario evaluar con más detalle la viabilidad de los terrenos antes de ser adquiridos, evitando así situaciones que perjudiquen a las compañías establecidas.
El caso de Industrias Murelli se suma a una serie de dificultades que han afectado el clima empresarial en Ibagué. Por ello, la CCI anunció que trabajará con la Administración Municipal para buscar soluciones que permitan mejorar las condiciones para la inversión y el desarrollo industrial en la capital tolimense.
A pesar de la insistencia de los gremios en la necesidad de mayor apertura y flexibilidad en la normatividad vigente, hasta el momento no se han anunciado medidas concretas por parte de la Alcaldía. Empresarios y comerciantes esperan que el caso de Murelli sirva como un llamado de atención para evitar que más compañías se vean obligadas a buscar nuevas sedes fuera del municipio.
La salida de esta empresa deja en evidencia los desafíos que enfrentan los inversionistas en Ibagué y plantea la necesidad urgente de reformar las políticas locales para garantizar la permanencia y crecimiento de la industria en la región.