La planta, con capacidad de 7.1 megavatios, reducirá más de 18.000 toneladas de CO2 al año y aportará excedentes a la red local.
Colombia da un paso importante hacia la sostenibilidad con la entrada en operación de la primera termoeléctrica del país que genera energía a partir de cascarilla de arroz. Ubicada en Yopal, Casanare, esta innovadora planta del Grupo Diana refuerza el liderazgo de la agroindustria en la transición hacia fuentes renovables.
Con una capacidad instalada de 7.1 megavatios, la termoeléctrica permitirá que la planta industrial del Grupo Diana autogenere el 100% de su consumo energético. Además, producirá excedentes que serán inyectados a la red local, beneficiando a la región de los Llanos Orientales.
El CEO de Grupo Diana, Andrés Murra, destacó la relevancia de este proyecto dentro de la estrategia de economía circular. “Este es un claro ejemplo de cómo la agroindustria puede innovar y generar energía limpia a partir de sus propios residuos, alineándose con la sostenibilidad”, afirmó.
La iniciativa es un hito en la reducción de la huella de carbono en la producción de arroz en Colombia. Se estima que la planta evitará la emisión de más de 18.000 toneladas de CO2 al año, contribuyendo al Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático.
Durante los tres años de construcción, el proyecto generó más de 1.200 empleos, consolidándose como un motor de desarrollo económico para Casanare. La termoeléctrica no solo garantiza energía asequible y no contaminante, sino que también fortalece el sector agrícola al darle un nuevo uso a la cascarilla de arroz.
La apuesta por la biomasa como fuente de energía renovable es clave en la transición energética del país. La termoeléctrica se suma a los esfuerzos nacionales por diversificar la matriz energética y reducir la dependencia de combustibles fósiles.
El Grupo Diana reafirma su compromiso con el crecimiento sostenible del país. “Con esta termoeléctrica, seguimos apostando por la innovación y el desarrollo ambientalmente responsable, beneficiando a la industria, la comunidad y el medioambiente”, concluyó Murra.
Este avance tecnológico marca un precedente en el sector energético y agroindustrial de Colombia, consolidando a Casanare como un referente en la implementación de energías limpias y sostenibles.