La sesión del Concejo de Ibagué se vio interrumpida de manera repentina cuando el presidente de la corporación, Ferney Varón, decidió suspenderla tras solo 12 minutos de inicio. Según Varón, esta medida fue tomada para proteger a los cabildantes de presuntos abusos por parte del secretario en los pagos correspondientes. Sus declaraciones han generado polémica y levantado sospechas sobre la existencia de irregularidades en el proceso de remuneración.
El presidente del Concejo, Ferney Varón, expresó su preocupación por el trato recibido tanto por él como por otros concejales. Hizo mención del secretario Juan Espinel, a quien describió como una persona con amplio conocimiento de los temas del Concejo, encargado de imponer orden en la institución. Sin embargo, Varón acusó a Espinel de negar los pagos a cabildantes como Orlando Rodríguez, e incluso a sí mismo en dos ocasiones, argumentando la falta de justificación de su presencia en las sesiones. Como medida preventiva, Varón sugirió que los concejales debían pedir permiso o permanecer constantemente en cámara para que el secretario Espinel procediera con los pagos.
La declaración de Varón también hizo referencia a posibles motivos detrás de esta situación, mencionando la posibilidad de que exista una “mano negra” involucrada. Aunque el presidente del Concejo aceptó los resultados electorales en el pasado, considera que la negación de los pagos va más allá de lo político y sugiere intereses ocultos en juego.
Cabe destacar que los pagos por sesiones a los concejales se realizan previa solicitud del cabildante, incluso si se trata de reuniones diarias, siempre y cuando se justifique su asistencia y se cumplan las normas establecidas. Varón también denunció que en algunas ocasiones, el secretario ha realizado pagos sin su autorización, lo que agrava aún más la situación y genera interrogantes sobre la transparencia en el proceso de remuneración.
Este incidente ha generado inquietud en el seno del Concejo de Ibagué, ya que los pagos justos y equitativos a los cabildantes son fundamentales para el correcto funcionamiento de la institución. Se espera que se realicen las investigaciones necesarias para esclarecer los presuntos abusos en los pagos y se tomen medidas para garantizar la imparcialidad en los procesos de remuneración.
A medida que se desarrollen las indagaciones, será crucial determinar si ha habido irregularidades en los pagos a los cabildantes y si se han violado los procedimientos establecidos. Además, será fundamental analizar la relación entre el presidente del Concejo, Ferney Varón, y el secretario Juan Espinel, con el fin de comprender mejor las dinámicas internas y las posibles motivaciones detrás de esta situación.
El Concejo de Ibagué enfrenta ahora el desafío de restablecer la confianza en la institución y garantizar que los pagos a los cabildantes sean transparentes y equitativos. La ciudadanía estará atenta a las medidas que se tomen para resolver estas presuntas irregularidades y asegurar que los procesos administrativos se lleven a cabo de manera justa y responsable.