Los chefs Yisseth Prieto y Yefrey Ávila sorprenden con nuevas versiones del icónico plato, fusionando tradición y creatividad en cada bocado.
La lechona tolimense, reconocida como el plato de cerdo más delicioso del mundo, ha sido reinterpretada en ANATO 2025 por los chefs Yisseth Prieto y Yefrey Ávila. Desde el stand del Tolima, los cocineros han cautivado a los asistentes con una propuesta innovadora de pasabocas que llevan este ícono gastronómico a un nuevo nivel.
Una de las creaciones que ha despertado mayor curiosidad es la trufa de insulso y lechona con salsa de mangostino, una fusión que une la tradición de la cocina tolimense con el toque exótico y agridulce de esta fruta insignia de la región. Su textura suave y su presentación evocan los famosos brigadeiros brasileños, pero con el inconfundible sabor del cerdo tolimense.
Otra propuesta que ha conquistado los paladares es la arepita boyacense rellena de lechona, un bocado que resalta por su equilibrio perfecto entre la esponjosidad de la masa y la jugosidad de la carne de cerdo. La combinación de texturas ha hecho que sea uno de los más solicitados por los visitantes de la feria.
Para los más arriesgados, los chefs han diseñado unos tacos de queso parmesano rellenos de lechona, donde el queso crujiente se convierte en un envoltorio que potencia los sabores de la carne, complementado con cebolla encurtida para un contraste de matices.
“El mundo gastronómico está pidiendo más innovación, por eso decidimos explorar nuevas recetas sin perder la esencia de la lechona, manteniendo sus procesos tradicionales pero en presentaciones distintas”, explicó la chef Yisseth Prieto sobre su propuesta culinaria.
El recibimiento del público ha sido excepcional. Visitantes nacionales e internacionales han quedado fascinados con estas versiones de la lechona. “La aceptación ha sido muy buena, la gente quedó sorprendida con esta reinvención en un formato gourmet. La salsa de mangostino, en particular, ha sido un éxito porque es una combinación poco convencional que ha sido bien recibida”, destacó el chef Yefrey Ávila.
Para algunos asistentes, la experiencia gastronómica ha sido toda una revelación. Nubia Acosta, visitante de Medellín, expresó su asombro: “Nunca imaginé que la lechona pudiera presentarse de esta manera. Es una verdadera obra de arte”.
Para Prieto y Ávila, este es solo el inicio de una nueva etapa en la gastronomía tolimense. Su propuesta demuestra que la tradición y la innovación pueden ir de la mano, llevando a la lechona a nuevas expresiones culinarias sin perder su esencia.