Médicos especialistas alertan sobre la falta de insumos, el daño de equipos claves como el tomógrafo y la posibilidad de tercerizar radiología. Denuncian pérdidas millonarias y pagos atrasados desde 2024.
El Hospital Federico Lleras Acosta de Ibagué atraviesa una de las crisis más graves de su historia reciente. En un comunicado público, los médicos especialistas denunciaron que la falta de medicamentos, insumos y el incumplimiento en los pagos comprometen la atención integral y ponen en riesgo la vida de miles de pacientes que dependen del principal centro hospitalario del Tolima.
Uno de los puntos más críticos es la parálisis del servicio de radiología. El tomógrafo de ocho canales, herramienta vital para atender entre 40 y 50 pacientes diarios, lleva más de cuatro meses fuera de servicio por fallas técnicas y problemas eléctricos. Esta situación ha impedido la realización de más de mil estudios al mes, generando pérdidas estimadas en 700 millones de pesos.
“Estamos enfrentando un dilema ético: sabemos lo que necesita un paciente para salvar su vida o mejorar su pronóstico, pero no siempre contamos con los medios para brindarlo”, advirtieron los médicos en la carta dirigida a la gerencia y a las autoridades de salud.
A las fallas técnicas y la falta de insumos se suma la deuda que arrastra la institución con los especialistas, quienes aseguran no recibir pagos desde diciembre de 2024. La situación ha deteriorado las condiciones laborales, al tiempo que aumenta la presión sobre los profesionales que continúan atendiendo urgencias y pacientes críticos.
Otro motivo de preocupación es la eventual tercerización del servicio de radiología. Según el personal del hospital, la gerencia estaría considerando entregar esta área a un prestador privado que ya opera un tomógrafo de 128 canales en otra sede. De concretarse, la medida pondría en riesgo los empleos de cerca de 15 trabajadores y abriría interrogantes sobre la calidad y el acceso a los estudios.
El Federico Lleras es considerado el corazón de la red hospitalaria del Tolima, con décadas de experiencia en atención de alta complejidad, programas materno-perinatales y formación académica. Sin embargo, los médicos advierten que la sostenibilidad de la institución está en entredicho si no se toman decisiones urgentes.
Las denuncias señalan que el desabastecimiento generalizado ha afectado desde cirugías hasta procedimientos básicos, generando retrasos que impactan en diagnósticos oportunos y en tratamientos de enfermedades de alto riesgo. Para los especialistas, esta situación ya empieza a traducirse en un deterioro de la salud pública del departamento.
“Necesitamos garantías mínimas para ejercer con seguridad, dignidad y conforme a la ley. Sin recursos, no es viable garantizar la continuidad de los servicios”, concluye el comunicado, que insta al Ministerio de Salud y a la Gobernación del Tolima a tomar medidas inmediatas para rescatar al hospital de la crisis.