La agente interventora Gloria Libia Polanía Aguillón anunció el inicio oficial de una auditoría forense en Nueva EPS, con el propósito de esclarecer posibles irregularidades de años anteriores. El proceso responde al llamado de la Presidencia, el Ministerio de Salud y la Superintendencia Nacional de Salud.
En un anuncio trascendental para el sistema de salud colombiano, la agente interventora de Nueva EPS, doctora Gloria Libia Polanía Aguillón, confirmó el inicio de una auditoría forense que buscará identificar con precisión las irregularidades presentadas en la entidad durante los últimos años. La medida responde a los lineamientos emitidos por la Presidencia de la República, el Ministerio de Salud y la Superintendencia Nacional de Salud.
Según explicó Polanía Aguillón, este proceso representa un paso firme en el compromiso del actual equipo interventor por garantizar la transparencia, la eficiencia administrativa y el manejo adecuado de los recursos públicos. La auditoría permitirá revisar detalladamente los procedimientos financieros y operativos que han generado preocupación en las autoridades y usuarios del sistema.
“Por primera vez y desde el inicio de la intervención, que ya completa un año y seis meses, podemos anunciar que se ha contratado la empresa encargada de ejecutar esta auditoría, la cual nos permitirá conocer a fondo la realidad administrativa y financiera de Nueva EPS”, afirmó la agente interventora.
La intervención, que comenzó debido a irregularidades detectadas en la gestión de la entidad, ha estado enfocada en recuperar la confianza de los más de 10 millones de afiliados. Con este nuevo paso, se busca no solo esclarecer los hechos del pasado, sino establecer mecanismos de control y prevención que eviten la repetición de malas prácticas.
Fuentes del Ministerio de Salud destacaron que este tipo de auditorías forenses son esenciales para fortalecer la gobernanza en el sector salud y garantizar que los recursos públicos sean utilizados en beneficio de los pacientes. Asimismo, subrayaron la importancia de que las entidades prestadoras actúen con total transparencia frente a los organismos de control.
La Superintendencia Nacional de Salud, por su parte, acompañará el proceso para asegurar que los resultados de la auditoría sean verificados con rigor técnico y jurídico. Este acompañamiento busca que las conclusiones del informe final sirvan de base para eventuales sanciones o ajustes estructurales dentro de la entidad.
La doctora Polanía Aguillón enfatizó que el compromiso del equipo interventor no se limita a la investigación, sino que incluye la implementación de estrategias de mejora continua en la atención, la gestión del talento humano y la optimización de los procesos administrativos. “Nuestro objetivo es recuperar plenamente la confianza de los usuarios y demostrar que una EPS pública puede operar con transparencia y calidad”, puntualizó.
El inicio de la auditoría forense marca un punto de inflexión en la historia reciente de Nueva EPS. Las autoridades esperan que, con este proceso, se logre un diagnóstico claro que permita la toma de decisiones correctivas y preventivas, fortaleciendo así la prestación de servicios de salud en todo el país.











