Por segunda vez consecutiva, un tubo de 24 pulgadas del sistema de acueducto alterno se rompió en el barrio El Libertador de Ibagué, afectando la vía recientemente pavimentada con recursos de la Gobernación. La comunidad exige soluciones definitivas por parte del IBAL.
Por segunda ocasión en menos de un año, se registró una grave ruptura en el tubo madre del acueducto alterno en el barrio El Libertador, ubicado en la comuna uno de Ibagué. La avería afectó una de las vías principales, justo la que había sido pavimentada con dineros de la Gobernación del Tolima tras años de espera por parte de la comunidad.
El daño, ocurrido esta semana, generó molestia entre los residentes del sector quienes responsabilizan directamente a la Empresa Ibaguereña de Acueducto y Alcantarillado (IBAL) por la fragilidad del sistema. Se trata de una tubería de 24 pulgadas que transporta agua desde el acueducto alterno, cuya presión volvió a provocar la rotura del ducto.
Esta nueva afectación destruyó parte del pavimento, levantó secciones de la vía y dejó el tramo intransitable. Los habitantes del sector denuncian que pese a las inversiones realizadas para mejorar la movilidad, el daño a la infraestructura se repite con preocupante frecuencia. “No es justo que después de tanto esperar el arreglo, vengan a dañarlo así”, expresó una residente.
Una de las mayores preocupaciones es la posibilidad de daños colaterales a viviendas, como ocurrió en la ruptura anterior. En aquella ocasión, la fuerza del agua inundó casas y levantó techos, por lo que los vecinos temen una situación similar. Ahora exigen una reparación de fondo y no solo un arreglo provisional.
Videos compartidos en redes sociales muestran el daño a la vía y las brigadas del IBAL trabajando para contener la emergencia. La presión social se ha intensificado, y algunos ciudadanos aseguran que el IBAL ha sido negligente en revisar a fondo la infraestructura del acueducto alterno antes de habilitarlo nuevamente.
Desde la empresa de acueducto aún no se emiten cifras oficiales, aunque confirmaron que se encuentran reparando el tramo afectado y evaluando otras posibles debilidades en la tubería. La comunidad, sin embargo, no se conforma con promesas. “Queremos hechos y garantías de que no volverá a pasar”, reclamaron.
Autoridades como la Secretaría de Infraestructura y el Instituto de Vías y Espacios Locales (IVAL) anunciaron que harán una verificación técnica en conjunto para determinar si las reparaciones han cumplido con los estándares requeridos y establecer responsabilidades.
Para los vecinos de El Libertador, esta situación es una muestra de la fragilidad institucional y la mala planeación de obras públicas. Reiteran que no permitirán más improvisaciones con los recursos públicos ni con la seguridad de sus familias.
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