En un contundente golpe contra la minería ilegal, las autoridades desplegaron la operación Orión 2, logrando la captura en flagrancia de ocho individuos que realizaban explotación ilícita de yacimientos mineros en la vereda San Cayetano.
El operativo fue llevado a cabo por la Policía Tolima, a través de la Seccional de Carabineros y Protección Ambiental, con el apoyo del Ejército Nacional Batot N°17, la Fuerza Aeroespacial Colombiana Cacom 4 y la Corporación Autónoma Regional del Tolima (Cortolima). Gracias a labores de inteligencia, se identificó la actividad ilegal en cercanías de la quebrada Manumbrito.
Durante la intervención, las autoridades sorprendieron a los presuntos mineros ilegales, entre los cuales se encontraba un ciudadano extranjero. Ninguno de los capturados contaba con los permisos exigidos por la ley para la explotación de recursos naturales en la zona.
Los detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía N°39 local de Coyaima por el delito de explotación ilícita de yacimientos mineros y otros materiales. Se espera que en las próximas horas sean presentados en audiencia virtual, donde se definirá su situación jurídica.
La minería ilegal en esta región representa una grave amenaza para los ecosistemas locales, especialmente para fuentes hídricas como la quebrada Manumbrito. Según Cortolima, este tipo de actividades genera contaminación y erosión, poniendo en riesgo la biodiversidad y el abastecimiento de agua para las comunidades cercanas.
El coronel de la Policía Tolima resaltó la importancia de este operativo y reiteró el compromiso de las autoridades en la lucha contra la explotación ilegal de recursos naturales. “No permitiremos que grupos ilegales sigan destruyendo nuestros ecosistemas. Seguiremos desplegando acciones contundentes para frenar estas actividades”, afirmó.
Las autoridades hicieron un llamado a la comunidad para que denuncie cualquier actividad sospechosa relacionada con la minería ilegal. Asimismo, recordaron que la explotación de yacimientos sin los debidos permisos es un delito grave que puede acarrear sanciones penales y ambientales.
Con este operativo, se refuerza el control sobre las actividades mineras en el sur del Tolima, reafirmando el compromiso de las instituciones con la protección ambiental y el uso legal y sostenible de los recursos naturales.