Durante un evento público en Armenia, el presidente Gustavo Petro realizó una serie de declaraciones que han sacudido el panorama político colombiano. El mandatario aseguró que un plan para “tumbarlo o asesinarlo” se ejecutará en los próximos tres meses, sin ofrecer detalles sobre quiénes estarían detrás de esta conspiración.
“O muere el Presidente o lo tumban. La orden está dada para estos tres meses. O asesinan al Presidente o lo sacan del Palacio de Nariño”, afirmó Petro en su intervención, generando alarma entre sus seguidores y polémica entre sus detractores, quienes rápidamente lo acusaron de promover el miedo y la paranoia.
El discurso, que fue transmitido en vivo, causó un gran revuelo en las redes sociales. Mientras muchos de sus simpatizantes llamaban a defender y proteger al Presidente, otros lo criticaron duramente, acusándolo de desviar la atención de los problemas más urgentes que enfrenta el país, como la inseguridad y la crisis económica.
Petro también aprovechó su intervención para criticar a los medios de comunicación, a los que ha señalado en varias ocasiones de ser cómplices de las mafias del narcotráfico y las élites económicas. “No matan al periodista que repite la ideología de los dueños del capital, matan al que critica, al que devela cómo nos gobiernan desde las mafias”, expresó con vehemencia.
Estas palabras del presidente llegan en un momento delicado para su gobierno, marcado por debates sobre la aprobación del presupuesto nacional y las reformas propuestas. Algunos analistas políticos han sugerido que Petro busca consolidar su base de apoyo con este tipo de mensajes, apelando a la percepción de amenazas externas.
La clase política también se ha pronunciado sobre el tema. Algunos senadores y representantes expresaron su preocupación por la seguridad de Petro y pidieron a las autoridades que investiguen la veracidad de las amenazas. Mientras tanto, otras figuras de la oposición han calificado las declaraciones como un intento de distracción ante las dificultades que enfrenta su gobierno.
Hasta el momento, el Gobierno no ha revelado información adicional sobre posibles medidas de seguridad adicionales para el presidente. Sin embargo, expertos en seguridad han advertido sobre la importancia de proteger al jefe de Estado y esclarecer la naturaleza de las amenazas mencionadas.
