El presidente Gustavo Petro manifestó públicamente su desconfianza hacia los resultados de las elecciones de 2026 si la Registraduría contrata nuevamente a la firma Thomas Greg & Sons, empresa encargada históricamente de la logística electoral.
A ocho meses del inicio de la temporada electoral, el presidente Gustavo Petro encendió las alarmas sobre la transparencia de las elecciones de 2026. En una intervención directa durante el espacio #LaSillaEnVivo, el mandatario expresó su desconfianza hacia los resultados que podría emitir la Registraduría Nacional si continúa contratando con la firma Thomas Greg & Sons.
Petro hizo referencia al inminente contrato que dicha empresa podría firmar hoy mismo, el cual incluiría la entrega del kit electoral para todos los comicios programados para el próximo año. “No confío en los resultados que pueda entregar la Registraduría si esta empresa sigue al frente del proceso”, afirmó el jefe de Estado.
El mandatario relacionó esta situación con el escándalo por la licitación de los pasaportes, también manejada por Thomas Greg. En ese caso, Petro ordenó frenar el proceso, lo que derivó en la destitución del entonces canciller Álvaro Leyva por desacato, y más recientemente, en la renuncia de la canciller Laura Sarabia, quien se rehusó a implementar el plan de emergencia presidencial.
Thomas Greg ha sido contratista clave del Estado en materia electoral durante los últimos 12 años. Su participación ha sido constante en elecciones de gran importancia, incluyendo las que llevaron a Petro a la Alcaldía de Bogotá en 2011 y, posteriormente, a la Presidencia de la República en 2022.
Paradójicamente, Petro ha resultado beneficiado en procesos electorales gestionados logísticamente por esta misma empresa, lo que ha generado controversia entre sus críticos, quienes cuestionan el cambio de postura frente a la firma.
No obstante, el presidente insiste en que la continuidad de Thomas Greg & Sons en la organización electoral genera riesgos de parcialidad, especialmente en un contexto donde se definirán alcaldías, gobernaciones, Congreso y la Presidencia.
Organizaciones de observación electoral han advertido sobre la necesidad de garantizar procesos contractuales más transparentes en la logística electoral, sin interferencias políticas que afecten la confianza pública.
La Registraduría, por su parte, aún no ha respondido oficialmente a las declaraciones del presidente, pero se espera que en las próximas horas se pronuncie sobre la adjudicación del contrato y las garantías para los próximos comicios.