Ante un informe que denuncia un recorte de $921.000 millones del presupuesto militar de 2025, el presidente Gustavo Petro lo calificó como “cínico y mentiroso”, aseguró que los soldados recibirán un salario equiparable al de los trabajadores y prometió modernización del armamento.
El presidente Gustavo Petro rechazó con firmeza este sábado las versiones que advierten sobre una crisis presupuestal en las Fuerzas Militares y la Policía. Dijo que se trata de “un desinforme lastimero … simplemente mentiroso”.
Según el informe cuestionado, la Casa de Nariño asignó inicialmente $33 billones para la seguridad en 2025, pero congeló $921.000 millones, lo que habría impactado el funcionamiento del Ejército, Policía, Armada y Fuerza Aeroespacial en zonas de alta conflictividad .
Frente a este panorama, Petro afirmó que no permitiría que ningún soldado permanezca “desnutrido o hambriento” en su gobierno, y dijo haber subido la bonificación del soldado regular para equipararla al salario de un trabajador asalariado .
El mandatario también recalcó que los miembros de la fuerza pública son “ciudadanos libres, en armas y al servicio del pueblo”. Enfatizó su voluntad de cuidar tanto el cuerpo como el alma de quienes arriesgan su vida por la seguridad nacional .
Además, Petro recordó que, en junio de 2025, el Gobierno autorizó vigencias futuras para renovar el armamento, promoviendo mayor autonomía tecnológica, con énfasis en software libre y producción nacional .
El presidente también afirmó que su objetivo es modernizar toda la fuerza pública, enfatizando que convertir el poder militar en “poder del pueblo colombiano” forma parte del proceso de transformación .
Sin embargo, alternativas como las expuestas por la revista Semana muestran cifras contrarias: el Ejército habría recibido solo 12 de los 22 billones solicitados; la Policía, 14 de 23; la Armada, 3 de 4,6; y la Fuerza Aeroespacial, menos que en 2024. Esto sugeriría recortes en mantenimiento e inteligencia .
En medio de este cruce de versiones, Petro insistió en su visión: “No hay soldados desnutridos o sin educar en mi Gobierno” y reiteró su compromiso con la bonificación y la modernización. El contraste entre las cifras oficiales y las declaraciones del presidente plantea un debate clave sobre la asignación y ejecución del presupuesto de seguridad.