Julián Rodríguez, abogado tolimense y vocero de la Veeduría Ciudadana Bajo la Lupa, confirmó que la infraestructura de las piscinas olímpicas de la calle 42 con carrera Quinta está prácticamente finalizada. Destaca el papel clave de la ciudadanía en la vigilancia de un proyecto que sufrió graves irregularidades.
Tras años de espera y controversias, la ciudad de Ibagué está a punto de recuperar uno de sus escenarios deportivos más emblemáticos. Las piscinas olímpicas ubicadas en la calle 42 con carrera Quinta presentan un avance del 99.9 %, según confirmó el abogado y veedor ciudadano Julián Rodríguez, miembro de la Veeduría Ciudadana Bajo la Lupa.
En entrevista con LAOTRAVERDAD.CO, Rodríguez detalló que la infraestructura gruesa de la obra ya está completamente terminada y que actualmente se adelantan trabajos menores como acabados, divisiones internas en los baños y la instalación de las botoneras del ascensor.
El proyecto, que ha estado envuelto en múltiples controversias y retrasos por más de ocho años, estuvo en el ojo del huracán tras el escándalo de corrupción que afectó los Juegos Nacionales 2015. La obra fue paralizada, rediseñada y su contrato ejecutado en varias fases durante distintas administraciones.
“Hoy podemos decir que este escenario está casi listo. Ya se resolvieron inconvenientes como los chorros de la piscina de clavados y se avanzó en la instalación de barandas en la plataforma de salto”, explicó Rodríguez.
Además, el abogado subrayó que el avance de la obra ha sido posible gracias a la vigilancia constante de la ciudadanía y al trabajo articulado de las administraciones posteriores al escándalo de desfalco. También resaltó el papel de la Contraloría General de la República y su equipo de participación ciudadana.
El vocero de la veeduría destacó que este proyecto se convierte en un símbolo de resistencia ciudadana frente a la corrupción. “Cuando hay compromiso y control social, incluso los proyectos más golpeados pueden salir adelante”, afirmó.
Rodríguez hizo un reconocimiento especial a las ligas deportivas, entrenadores, atletas y ciudadanos que desde el principio alzaron la voz y exigieron el cumplimiento de esta obra estratégica para el deporte tolimense.
Aunque quedan algunos detalles técnicos por resolver, el plazo contractual culmina en la fecha actual, marcando así el cierre administrativo de un proceso que inició con múltiples tropiezos pero que hoy se perfila como un logro colectivo.
La comunidad espera ahora que las piscinas entren pronto en funcionamiento y estén disponibles para el uso de deportistas locales, nacionales e internacionales, en beneficio del desarrollo deportivo de Ibagué y el Tolima.