En un tono irónico y crítico, se presenta una receta para preparar “Fachos”, utilizando ingredientes como la corrupción, la indiferencia y discursos de odio. El proceso describe la formación de una “masa corrupta” que se alimenta de la polarización y la manipulación en redes sociales, culminando en elecciones que legitiman su posición de poder.
Caricatura por: @Átomo Cartún.
Esto sugiere que, con tiempo y práctica, este fenómeno puede replicarse, generando un ambiente social dividido y propenso a la intolerancia. La crítica subyacente apunta a la normalización de prácticas antidemocráticas y la complicidad de ciertos sectores en su perpetuación.