El proyecto del cable aéreo de Ibagué, uno de los planes destacados de la administración del exalcalde Andrés Hurtado, enfrenta serios retrasos. Aunque el contrato para los estudios y diseños fue adjudicado hace casi nueve meses por $2.587 millones, el proyecto sigue detenido debido a la falta de una interventoría. La Alcaldía de Ibagué declaró desierto el proceso de contratación de la interventoría, un paso crucial para el seguimiento técnico del cumplimiento de los estudios y diseños. Esta decisión se basó en que las ofertas presentadas por el Consorcio Aires del Sur y GHF Ingenierías superaron el presupuesto oficial.
El Sistema Electrónico de Contratación Pública, Secop II, detalla que tras la apertura de ofertas, ambas propuestas excedieron el presupuesto asignado, lo que llevó al comité evaluador a recomendar declarar desierto el proceso. Esta recomendación fue aceptada el pasado 5 de junio.
La Secretaría de Infraestructura de Ibagué confirmó a Ecos del Combeima que el proceso de contratación de la interventoría deberá iniciarse nuevamente. Este reinicio ha causado un retraso significativo en la estructuración de los estudios y diseños del cable aéreo.
Este proyecto forma parte de una serie de iniciativas de infraestructura impulsadas por Andrés Hurtado, que también incluyen el puente elevado de la calle 60 y el tranvía. Estos proyectos tienen como objetivo modernizar la infraestructura de transporte y mejorar la movilidad urbana en Ibagué.
A pesar de los retrasos, las autoridades locales están comprometidas con la realización del proyecto del cable aéreo. La administración actual busca resolver los problemas de contratación para reanudar el avance de los estudios y diseños a la mayor brevedad posible.
La comunidad de Ibagué espera con impaciencia avances concretos en el proyecto del cable aéreo, que promete ser una solución innovadora para el transporte en la ciudad. Las autoridades trabajan para superar los obstáculos actuales y asegurar que el proyecto pueda continuar sin más interrupciones. El éxito del cable aéreo representaría una mejora significativa en la movilidad urbana y sería un símbolo del progreso y modernización de Ibagué. Con la reanudación de los procesos de contratación, se espera que la obra pueda iniciarse pronto y cumplir con las expectativas de la comunidad.