En la mañana del jueves 3 de agosto, las calles de Ibagué fueron testigos de una concentración de sindicatos y choferes del transporte público que se encuentran en huelga desde hace 10 días. La protesta, realizada en la calle 37 con Quinta Avenida, es una muestra de apoyo a los conductores que se oponen al reciente convenio firmado entre el gobierno de la ciudad e Infotic para el Sistema Estratégico de Transporte Público (SEPT).
Los manifestantes no solo protestan por el acuerdo de la SEPT, sino que también expresan su preocupación por la mala infraestructura de las escuelas y la falta de atención a varias Unidades de Integración Social (USI). Según José Edilson Pava, líder de los transportistas, la responsabilidad de resolver la situación es de la administración de la ciudad. Enfatiza la necesidad de una participación y un diálogo constructivos que involucren a todas las partes interesadas, incluidos los conductores, propietarios, usuarios, empresas de transporte y el gobierno municipal. Él insta a un esfuerzo de colaboración para encontrar soluciones.
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El foco principal de la reunión se encuentra actualmente en la calle 37 con la Quinta Avenida, lo que genera interrupciones en el tráfico en el área. Los manifestantes también han bloqueado la Sexta Avenida. A lo largo del día, los organizadores decidirán si continúan con una protesta móvil o mantienen su presencia en la ubicación actual.
La huelga ha creado interrupciones significativas en la ciudad, dejando a los ciudadanos y viajeros luchando por encontrar opciones alternativas de transporte. Los manifestantes exigen que el gobierno tome en serio sus preocupaciones y participe en negociaciones significativas para encontrar una solución.
A medida que se desarrolla la situación, las autoridades locales deberán trabajar para resolver la disputa y abordar las quejas planteadas por los manifestantes. La huelga atrajo la atención del público y las autoridades están bajo presión para actuar con prontitud y eficacia para restablecer la normalidad en los servicios de transporte de la ciudad.
A la luz de la protesta en curso y su impacto en la vida diaria, se insta a los funcionarios de la ciudad a entablar un diálogo constructivo para buscar puntos en común. Los residentes de la ciudad esperan que el gobierno municipal tome medidas proactivas para encontrar una solución y poner fin a la crisis del transporte.
La situación sigue siendo fluida y se esperan más desarrollos a medida que las demandas de los manifestantes repercuten en un número cada vez mayor de personas. Ahora es crucial que la dirección de la ciudad actúe con decisión y encuentre una solución amistosa para poner fin a la huelga y restablecer los servicios regulares de transporte a los ciudadanos de Ibagué.
