Con la presentación de las 13 embajadoras departamentales que deslumbran en sus despampanantes trajes y carrozas, pero la calma fue interrumpida abruptamente por el inadecuado comportamiento de algunos ciudadanos que invadieron el carril destinado para la muestra folclórica.
Pese a los esfuerzos de la Policía Metropolitana de Ibagué (Metib) por manejar la situación que pone en tela de juicio la autoridad del Alcalde Andrés Fabián Hurtado y su Secretario de Gobierno, Milton Restrepo, al parecer responsables de garantizar la seguridad y la tranquilidad de los ibaguereños y vistantes, para el disfrute de un magno evento como son los tradicionales desfiles de San Juan y San Pedro en Ibagué.
De igual formo, otro hechos quedó registro en la memoria de los propio y vistantes quienes observaron que en pleno desfile de las fiestas del folclor Sanpedrino y sin ningún control por parte de las autoridades policiales o autoridad municipal, se registró una riña a machete en plena Carrera 5.
Hasta el momento se desconoce si hubo capturados o heridos por los desmanes y riñas a machete, porque mientras unos disfrutaron el desfile, otros se prendieron fuego a la marcha. La aparente ausencia del mandatario local y su Secretario de Gobierno para que garanticen el orden y la seguridad en este tipo de eventos, genera preocupación entre los habitantes y deja en evidencia la falta de capacidad de la administración local para hacer valer la ley en situaciones críticas.
La invasión del carril destinado al desfile, las riñas y los desmanes son una afrenta a la tradición cultural y a la convivencia pacífica en la ciudad de Ibagué. Estos actos de violencia empañan la imagen de la ciudad y ponen en peligro la integridad de los asistentes. Es urgente que las autoridades competentes tomen medidas drásticas para evitar que este tipo de situaciones se repitan en el futuro. Se deben reforzar los dispositivos de seguridad, aumentar la presencia policial y establecer protocolos efectivos para prevenir y controlar cualquier acto de violencia durante eventos de gran convocatoria.
Finalmente, la ciudadanía también tiene un papel fundamental en este proceso. Es importante que se fomente la cultura del respeto, la convivencia pacífica y la denuncia de cualquier acto de violencia o alteración del orden público. Solo así se podrá recuperar la tranquilidad y la confianza en eventos de gran importancia cultural como el Desfile Nacional del Folclor.