El alcalde Javier Orlando Montilla alertó sobre la disminución histórica del caudal en quebradas que abastecen al municipio. Pide medidas urgentes para prevenir incendios y proteger el recurso hídrico.
El municipio de Villarrica, en el oriente del Tolima, enfrenta una situación crítica debido a la combinación de altas temperaturas, sequía y prácticas de quemas controladas. El alcalde Javier Orlando Montilla advirtió que el caudal de varias fuentes hídricas que abastecen a la población se encuentra en niveles históricamente bajos, lo que pone en riesgo el suministro de agua para los habitantes.
Según el mandatario, la reducción del caudal ha sido particularmente evidente en las quebradas Cuinde Negro y Cuinde Blanco, fuentes vitales para la comunidad. “Estamos evidenciando una disminución histórica en el cauce de varias de las fuentes hídricas. Sí es preocupante, el verano ha sido de corto tiempo pero muy intenso y nos preocupa”, afirmó Montilla.
El alcalde señaló que, a esta grave situación, se suma la persistencia de las denominadas quemas controladas en algunas veredas, una práctica que, aunque culturalmente arraigada, incrementa el riesgo de incendios forestales y deteriora el suelo. Pese a las campañas de prevención adelantadas por la administración, estas actividades continúan realizándose en zonas rurales.
Montilla hizo un llamado urgente a la comunidad para que evite este tipo de quemas, recordando que su impacto va más allá de la vegetación, ya que contribuyen al deterioro del entorno y afectan la recuperación de las cuencas hídricas. “Nuestro llamado de atención es para que se detengan estas prácticas que aumentan el riesgo de emergencias ambientales”, enfatizó.
Ante el panorama, el mandatario solicitó la intervención de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y otras entidades competentes, con el fin de adoptar medidas preventivas que mitiguen los efectos de la sequía. También instó a fortalecer la vigilancia para sancionar a quienes continúen con quemas que comprometan la seguridad y el ambiente.
La administración municipal ha advertido que, de no tomarse acciones inmediatas, Villarrica podría enfrentar restricciones severas en el suministro de agua. Esto afectaría no solo el consumo humano, sino también las actividades agrícolas y pecuarias que dependen del recurso.
Organizaciones ambientales locales han respaldado el llamado del alcalde, subrayando que la conservación de las fuentes hídricas es clave para garantizar la sostenibilidad del municipio. Asimismo, propusieron que se refuercen las campañas de educación ambiental y se implementen planes de manejo integral de cuencas.
Finalmente, Montilla reiteró que la prevención es la mejor herramienta para evitar una crisis mayor. “Si seguimos combinando altas temperaturas, sequía y quemas, el riesgo de perder nuestras fuentes hídricas será cada vez mayor. Debemos actuar hoy para garantizar el agua del mañana”, concluyó.