La capital del Tolima registra dos menores y cinco adultos lesionados por manipulación de pólvora en los primeros días de diciembre. La Alcaldía refuerza controles, activa rutas de atención y reitera la prohibición para prevenir nuevos casos durante las festividades.
Las autoridades municipales confirmaron que aumentó a siete el número de personas quemadas por pólvora en lo corrido de diciembre en Ibagué, una cifra que preocupa por la recurrencia de estos casos en temporada decembrina. Entre los afectados se encuentran dos menores de edad y cinco adultos, quienes fueron atendidos en distintas instituciones de salud de la ciudad. La situación ha llevado a reforzar las acciones de vigilancia y a insistir en el llamado a evitar la manipulación de artefactos pirotécnicos.
El caso más reciente involucra a un menor de 13 años residente en zona rural, quien resultó con quemaduras tras manipular un elemento pirotécnico sin supervisión. El incidente obligó a activar de inmediato las rutas de atención establecidas para menores lesionados, además de la articulación entre autoridades sanitarias y entidades de protección. Este episodio se suma al preocupante aumento de registros en comparación con años anteriores.
Según el informe entregado por la Secretaría de Salud, las víctimas tienen entre 13 y 67 años y fueron atendidas en centros asistenciales como la Unidad de Salud de Picaleña, el Hospital Federico Lleras Acosta, la Clínica Nuestra y la Unidad Intermedia de El Salado. Cada uno de los casos fue reportado al Sistema de Vigilancia en Salud Pública, con el fin de hacer seguimiento al estado de las personas afectadas y adoptar medidas correctivas.
La secretaria de Salud (e), Maricel Aguiar, reiteró el llamado a evitar el uso de pólvora, especialmente en espacios donde hay presencia de niños. Señaló que estos artefactos siguen representando un riesgo grave y completamente prevenible, provocando lesiones que dejan secuelas físicas y emocionales. Aguiar destacó que “la pólvora no es un juego; cada lesión implica dolor, incapacidad y riesgo para la vida”, insistiendo en adoptar prácticas responsables.
Los casos reportados presentan quemaduras de distintos grados, con afectaciones en manos, rostro y extremidades, lo que demuestra que incluso los artefactos considerados de bajo impacto pueden causar daño significativo. Las autoridades advirtieron que muchos de estos accidentes ocurren por descuidos, manipulación inadecuada o presencia de pólvora en manos de menores, pese a las prohibiciones vigentes. Esta situación exige mayor corresponsabilidad de las familias.
La Alcaldía de Ibagué indicó que continuará con los controles en barrios y zonas rurales donde tradicionalmente se registra mayor uso de pólvora. Estas acciones incluyen visitas preventivas, operativos interinstitucionales, pedagogía comunitaria y verificación del cumplimiento de la normatividad. Las autoridades buscan disminuir la incidencia de quemados y proteger especialmente a los menores, quienes suelen ser las principales víctimas durante esta época.
Asimismo, se recordó que la fabricación, comercialización y uso de pólvora sin permiso están estrictamente prohibidos, y quienes incurran en estas prácticas podrán enfrentar sanciones económicas y procesos de tipo penal. La administración municipal insiste en que las festividades pueden disfrutarse sin poner en riesgo la salud o la vida. Para ello, promueve alternativas seguras como espectáculos autorizados y actividades culturales sin pirotecnia.
Finalmente, las autoridades invitaron a la ciudadanía a reportar cualquier manejo ilegal o inadecuado de pólvora a las líneas de emergencia para actuar con rapidez. El llamado reiterado es a celebrar de forma responsable y proteger a los niños, quienes pueden sufrir las consecuencias más graves de estos accidentes. La meta es cerrar el mes decembrino sin nuevas víctimas y fortalecer la conciencia del riesgo entre todos los ibaguereños.









