El Servicio Geológico Colombiano confirmó un aumento moderado en la energía sísmica liberada y el número de eventos entre el 9 y el 15 de diciembre, manteniendo la vigilancia permanente bajo el protocolo de alerta amarilla.
El volcán Cerro Machín, uno de los sistemas geológicos más monitoreados del país, presentó un comportamiento dinámico durante la segunda semana de diciembre. El Servicio Geológico Colombiano (SGC) informó que, entre los días 9 y 15 de dicho mes, se detectó un incremento leve en la actividad sísmica interna. Estos eventos están vinculados directamente al proceso de fracturamiento de roca dentro del edificio volcánico, un fenómeno común en estructuras activas. A pesar de este repunte en las cifras frente a la semana anterior, el sistema mantiene una relativa estabilidad en su diagnóstico general. Las autoridades técnicas continúan procesando los datos captados por las estaciones de monitoreo instaladas estratégicamente en la zona de influencia.
La ubicación de los sismos permitió identificar que la actividad se concentró en áreas específicas de los flancos sur, suroccidental y occidente-suroccidental. Según el boletín técnico, los epicentros se localizaron a distancias inferiores a los cinco kilómetros con respecto al domo principal del volcán. En cuanto a la intensidad, los reportes señalan que los sismos fueron de un nivel de energía bajo, con magnitudes menores a 1. Las profundidades registradas oscilaron en un rango estrecho de entre tres y cinco kilómetros medidos desde la cima volcánica. Esta precisión en la localización es vital para que los geólogos determinen posibles desplazamientos de fluidos o presiones internas.
[Image: Boletín semanal del volcán Cerro Machín emitido por el SGC el 16 de diciembre de 2025, destacando el estado de alerta amarilla.]
Un aspecto fundamental del reporte es la estabilidad de otros factores críticos que complementan el diagnóstico integral de la actividad volcánica. El SGC aclaró que, más allá del número de sismos, los demás parámetros medidos no presentaron variaciones de importancia durante el periodo evaluado. Esto incluye la estabilidad en la emisión de gases, cambios en la morfología del terreno o variaciones en las fuentes termales. La ausencia de cambios en estos indicadores adicionales sugiere que el sistema sigue operando dentro de su comportamiento base actual. Por lo tanto, no se han detectado señales que indiquen una evolución acelerada hacia un evento eruptivo en el corto plazo.
Debido a estas manifestaciones, el volcán Cerro Machín permanece oficialmente en estado de alerta amarilla, según el esquema de clasificación nacional. Esta categoría define al volcán como un sistema activo que presenta cambios por encima del nivel base de los parámetros monitoreados. La alerta amarilla implica que, aunque hay actividad perceptible, no existe una inminencia de peligro catastrófico para las poblaciones cercanas. El SGC enfatizó que este estado es recurrente en volcanes activos y requiere una observación constante de su evolución. Es importante que la ciudadanía comprenda que la alerta amarilla no es un llamado a la evacuación inmediata en este momento.
Las autoridades del SGC, entidad adscrita al Ministerio de Minas y Energía, hicieron un llamado a la responsabilidad informativa y la prevención. Recomendaron a la comunidad que habita en el área de influencia seguir atentamente la evolución del volcán mediante canales oficiales. La información debe ser consultada únicamente en los boletines semanales y comunicados emitidos por las entidades técnicas gubernamentales para evitar noticias falsas. Asimismo, se instó a los ciudadanos a acatar las instrucciones de las autoridades locales y departamentales ante cualquier cambio. La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) también permanece vinculada a estos procesos de monitoreo preventivo.
El monitoreo que realiza el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Manizales es permanente, operando las 24 horas del día durante todo el año. Gracias a esta tecnología, cualquier cambio súbito en la actividad del Cerro Machín será informado de manera oportuna a la opinión pública. El SGC utiliza equipos de alta sensibilidad capaces de detectar hasta los sismos más imperceptibles para el ser humano. La transparencia en la entrega de estos datos busca fortalecer la cultura de la gestión del riesgo en los departamentos afectados. La vigilancia continua es la principal herramienta para mitigar el impacto de cualquier fenómeno natural relacionado con este edificio volcánico.
Es necesario recordar que el Cerro Machín es un volcán de naturaleza explosiva, lo que justifica el rigor extremo en su vigilancia técnica. Históricamente, este tipo de sistemas puede mantener estados de alerta amarilla por periodos prolongados sin que esto signifique una erupción. El leve aumento en la sismicidad registrado esta semana es parte de los ciclos naturales de reajuste interno del volcán. Los expertos del SGC reiteran que los cambios son moderados y no representan, por ahora, una ruptura en el equilibrio del sistema. La sismicidad localizada a menos de 5 km del domo es un indicador clave que se mantiene bajo estudio detallado.
Finalmente, se invita a la población a participar en las jornadas de socialización de riesgo y a conocer las rutas de evacuación. El conocimiento previo de cómo actuar ante un cambio en el nivel de alerta es la mejor defensa para las comunidades. El SGC continuará publicando enlaces y detalles técnicos sobre el esquema de clasificación de alertas para educación del público general. La seguridad de las regiones aledañas al volcán depende tanto de la tecnología de punta como de la preparación ciudadana. Por ahora, la tranquilidad debe primar mientras se sigan estrictamente las recomendaciones de los expertos y los organismos de socorro.
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