El presidente criticó la ausencia de Adriana Matiz en un acto oficial, mientras la mandataria defendió su agenda y rechazó el discurso confrontacional del Gobierno Nacional.
Un nuevo choque político se presentó entre el presidente Gustavo Petro y la gobernadora del Tolima, Adriana Matiz, luego de que el mandatario lamentara su ausencia en un evento oficial en Chicoral, insinuando motivos políticos. La gobernadora, por su parte, justificó su inasistencia y cuestionó el tono del discurso gubernamental.
Durante su intervención, Petro hizo referencia directa a la ausencia de Matiz con un comentario que avivó la controversia. “No puedo saludar a la Gobernadora del Tolima porque no quiso venir aquí; temas de la decencia política”, afirmó el jefe de Estado, recordando el reciente desencuentro entre ambos en la Cumbre de Gobernadores en Boyacá.
Desde Ambalema, donde inauguró un puente con una inversión superior a los $21.000 millones, Matiz explicó que su ausencia en Chicoral obedecía a compromisos previamente adquiridos. Además, destacó que la obra mejorará la conectividad del norte del Tolima con Ibagué y otras localidades, beneficiando a miles de habitantes.
La gobernadora también se pronunció sobre la controversia con el presidente, aclarando que su postura en la Cumbre de Gobernadores no fue un acto de irrespeto, sino una solicitud legítima de recursos para el departamento. “Este departamento necesita mayor inversión del Gobierno Nacional. Tras mi intervención, se giraron los recursos del Programa de Alimentación Escolar (PAE), deuda que se tenía pendiente desde el año pasado”, sostuvo.
Además, Matiz rechazó el tono de algunos discursos pronunciados en Chicoral por funcionarios del Gobierno Nacional, asegurando que estos promovían la polarización. “No estoy de acuerdo con que se utilicen escenarios públicos para incitar la violencia y el odio entre los colombianos. No podemos permitir una lucha de clases que divida aún más al país”, enfatizó.
Mientras tanto, en su intervención, Petro insistió en la necesidad de cambios estructurales y criticó la falta de apoyo a sus reformas sociales en el Congreso. “Ya el Congreso hace huelga y no quiere aprobar las reformas. Se les olvidó que yo gané las elecciones en 2022”, expresó el presidente, dejando clara su inconformidad con el trámite legislativo.
En el mismo evento, el jefe de Estado hizo un llamado a la movilización ciudadana, especialmente del sector campesino, para exigir transformaciones sociales. “Convoco a una gran movilización campesina, nacional, pacífica, pero decidida, porque el pueblo no se puede callar”, declaró Petro.
Este nuevo rifirrafe entre el presidente y la gobernadora del Tolima refleja la creciente tensión entre el Gobierno Nacional y algunos líderes regionales, en un contexto donde la descentralización de recursos y la inversión en las regiones son temas de debate permanente.
El incidente también deja interrogantes sobre la relación entre la Casa de Nariño y las administraciones departamentales, así como sobre el impacto de estos enfrentamientos en la ejecución de proyectos estratégicos para el desarrollo territorial.