El Tribunal Superior de Bogotá revocó la condena contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez y determinó que no existían pruebas suficientes para mantener la sentencia por soborno a testigos y fraude procesal. La decisión pone fin, por ahora, a uno de los procesos más polémicos de la justicia colombiana.
El Tribunal Superior de Bogotá absolvió al expresidente Álvaro Uribe Vélez en el proceso por presunto soborno a testigos y fraude procesal, revocando la condena impuesta en primera instancia que lo había sentenciado a 12 años de prisión domiciliaria. La decisión fue adoptada este martes por la Sala Penal del alto tribunal, tras estudiar el recurso de apelación presentado por la defensa del exmandatario.
Los magistrados Manuel Antonio Merchán, Alexandra Ossa y Leonor Oviedo concluyeron que no se cumplía el estándar probatorio necesario para mantener la sentencia emitida por la jueza Sandra Liliana Heredia en agosto pasado. Según la nueva determinación, las pruebas presentadas no demostraban la participación directa de Uribe en los hechos.
El proceso judicial se originó por las actuaciones del abogado Diego Cadena, señalado de haber ofrecido beneficios a los reclusos Juan Guillermo Monsalve y Carlos Enrique Vélez para modificar sus declaraciones. Ambos testigos habían vinculado anteriormente al expresidente con supuestos nexos con grupos paramilitares.
La jueza Heredia, en su fallo inicial, consideró que existían elementos suficientes para establecer una estrategia de manipulación de testigos. Sin embargo, el Tribunal determinó que las interceptaciones telefónicas y las pruebas recopiladas no eran concluyentes para demostrar que Uribe hubiera ordenado o tenido conocimiento directo de las gestiones realizadas por su abogado.
“La valoración probatoria no permite afirmar, más allá de duda razonable, la existencia de una conducta dolosa atribuible al exmandatario”, indicó la ponencia, enfatizando que los testimonios y grabaciones carecían de consistencia para mantener una condena.
Tras conocerse la decisión, la defensa del expresidente celebró el fallo, destacando que se trataba de un acto de justicia luego de años de cuestionamientos. “Se ha demostrado la inocencia del presidente Uribe, quien siempre confió en la institucionalidad del país”, manifestó su abogado Jaime Granados.
El proceso contra Uribe, que inició en 2018, ha sido uno de los más mediáticos en la historia reciente del país, marcando un hito en la relación entre el poder político y el sistema judicial colombiano. Su desenlace genera diversas reacciones en el ámbito político, especialmente entre quienes consideran que el caso refleja la tensión entre justicia y poder.
Por ahora, la Fiscalía General de la Nación no ha confirmado si interpondrá recursos adicionales frente a la decisión del Tribunal. Mientras tanto, el expresidente Uribe ha reiterado que continuará defendiendo su honor y su trayectoria política ante la opinión pública.











