El expresidente Álvaro Uribe publicó una carta firmada por Gustavo Petro en la que se acoge a un indulto tras su militancia en el M-19, desatando una nueva controversia política. El gesto es interpretado como un intento de comparar su situación judicial con la del actual mandatario.
Una nueva controversia sacude el escenario político colombiano luego de que el expresidente Álvaro Uribe Vélez compartiera en su cuenta de X (antes Twitter) una carta fechada el 29 de octubre de 1991, firmada por el hoy presidente Gustavo Petro, en la que este solicita un certificado judicial basándose en el indulto que le habría sido otorgado por su participación en el grupo guerrillero M-19.
El documento, dirigido a la Sección Jurisdiccional del Cuerpo Técnico de Policía Judicial, muestra a Petro argumentando que participó en las elecciones constituyentes tras acogerse al indulto concedido en el marco del proceso de paz con esa organización armada. “He sido beneficiado con el indulto consagrado en los decretos expedidos por el Gobierno Nacional”, se lee en la carta.
La publicación de Uribe vino acompañada del mensaje: “Otra mentira del Pte Petro, me respondió que no fue indultado, aquí escribió lo contrario”. Con ello, el líder del Centro Democrático pone en tela de juicio la versión que Petro ha sostenido públicamente de no haber recibido ese beneficio jurídico.
La reacción no se ha hecho esperar en redes sociales, donde analistas y ciudadanos han señalado que el gesto de Uribe podría interpretarse como una forma soterrada de solicitar para sí mismo un tratamiento similar, en medio de las investigaciones penales que enfrenta por presunta manipulación de testigos.
Algunos sectores señalan que esta estrategia busca validar la idea de que si Petro, con un pasado insurgente, fue indultado, Uribe también debería tener acceso a un beneficio jurídico, especialmente ahora que su proceso no avanza en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), tribunal que él mismo ha criticado y rechazado.
Cabe recordar que la JEP fue creada para juzgar a los actores del conflicto armado colombiano, incluidos agentes del Estado, y ha sido reiteradamente blanco de cuestionamientos por parte de Uribe, quien ha calificado ese tribunal como parcializado. Sin embargo, hoy sugiere —de manera implícita— que un camino alternativo podría ser el indulto.
Este cruce reabre el debate sobre las contradicciones, no solo del presidente Petro, sino también de Uribe, al usar una carta de hace más de 30 años para cuestionar al actual jefe de Estado, mientras deja entrever su propio interés en recibir beneficios similares.
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