En medio de una ola de protestas en distintos sectores de Ibagué por la escasez de agua, el Instituto de Acueducto y Alcantarillado de Ibagué (Ibal) emitió un comunicado defendiendo la calidad de su servicio, afirmando que solo el 10% de sus usuarios enfrenta intermitencia en el suministro.
Con 171 mil usuarios en la ciudad, el Ibal sostiene que la mayoría disfruta de una “excelente prestación del servicio”. Sin embargo, las constantes manifestaciones en sectores como la calle 42, Comfenalco, Ciudadela Simón Bolívar, El Salado y Picaleña demuestran lo contrario, reflejando la insatisfacción generalizada de la ciudadanía.
El comunicado también señala las condiciones climáticas como factor determinante en los cierres frecuentes de las bocatomas Combeima, Cay y Chembe, justificando así las interrupciones en el abastecimiento. Además, el Ibal insiste en la importancia de que los hogares cuenten con tanques de reserva para mitigar los impactos de estas interrupciones.
No obstante, la desconexión entre la percepción ciudadana y la respuesta del Ibal persiste, y esta tarde, residentes bloquearon nuevamente la avenida Pedro Tafur en señal de protesta.
La indignación de la comunidad refleja la urgencia de abordar las deficiencias en el servicio de agua y destaca la necesidad de una comunicación más efectiva por parte de la empresa para reconstruir la confianza de los ciudadanos.