Consejo de Estado ratifica elección de Johana Aranda como alcaldesa de Ibagué
El Consejo de Estado falló a favor de la alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda, ratificando su elección y rechazando la demanda de nulidad electoral que buscaba su destitución. Con esta decisión, Aranda podrá continuar su mandato sin inconvenientes hasta el final del periodo para el cual fue elegida en las elecciones territoriales de 2023 .
La demanda había sido presentada por José Baruth Tafur, quien argumentó que Aranda incurrió en doble militancia, ya que no habría renunciado a tiempo al Partido Conservador antes de recibir el aval del Centro Democrático. No obstante, tanto el Tribunal Administrativo del Tolima como el Consejo de Estado consideraron que no existían pruebas contundentes para demostrar la supuesta irregularidad .
Implicaciones del fallo
Con esta decisión judicial, se despeja cualquier duda sobre la legitimidad del mandato de Aranda, evitando una crisis política en la administración de Ibagué. Además, el resultado fortalece el poder del movimiento político ‘hurtadista’, ya que Aranda es una de las principales figuras de este sector, lo que indirectamente favorece las aspiraciones políticas del exalcalde Andrés Hurtado .
El fallo también deja en evidencia que la estrategia de la defensa de José Baruth Tafur no fue lo suficientemente sólida, o que las pruebas presentadas carecían del peso suficiente para demostrar la doble militancia de la mandataria.
Así, Johana Aranda continúa al frente de la alcaldía con plena legitimidad, consolidando su liderazgo y dando estabilidad a la administración municipal.
Implicaciones políticas del fallo y opciones de la oposición en Ibagué
El fallo del Consejo de Estado, que ratifica a Johana Aranda como alcaldesa de Ibagué, tiene importantes repercusiones políticas a nivel local y departamental.
1. Fortalecimiento del movimiento ‘hurtadista’
Con la confirmación de Aranda en el cargo, se consolida la presencia del movimiento político liderado por el exalcalde Andrés Fabián Hurtado, quien ha sido una figura clave en la administración municipal. Esto le permite seguir proyectando su influencia en el gobierno local y, eventualmente, impulsar nuevas candidaturas dentro de su círculo político, especialmente con miras a futuras elecciones en Tolima.
Además, este respaldo judicial fortalece la percepción de Aranda como una mandataria legítima, lo que le permitirá continuar con su plan de gobierno sin la sombra de una posible destitución.
2. ¿Qué le queda a la oposición?
La oposición, encabezada por sectores que promovieron la demanda de nulidad electoral, se enfrenta ahora a un escenario más complicado. Con esta decisión, sus opciones legales en el ámbito electoral se reducen considerablemente. Sin embargo, aún tienen algunos caminos posibles:
Recurso ante instancias internacionales
Si bien el Consejo de Estado es la máxima autoridad en temas de nulidad electoral en Colombia, los opositores podrían llevar el caso a organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), argumentando una presunta vulneración del debido proceso. Sin embargo, este tipo de procesos suelen ser largos y con pocas posibilidades de éxito en términos prácticos.
Mecanismo de revocatoria de mandato
Una alternativa más viable es impulsar una revocatoria de mandato. Este mecanismo democrático, contemplado en la Constitución de Colombia, permite a los ciudadanos remover a un alcalde antes de que termine su periodo, siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos:
- Recolección de firmas: Se debe presentar una solicitud ante la Registraduría Nacional del Estado Civil, acompañada de firmas equivalentes al 40% de los votos obtenidos por la mandataria en las elecciones.
- Aprobación del proceso: La Registraduría verifica la autenticidad de las firmas y autoriza la convocatoria a las urnas.
- Votación ciudadana: Para que la revocatoria sea válida, debe participar al menos el 55% del total de votantes que sufragaron en los comicios donde fue elegida la alcaldesa, y una mayoría debe votar a favor de su destitución.
3. Impacto en las futuras elecciones
El escenario político en Ibagué se torna más complejo de cara a las próximas elecciones regionales y departamentales. Con Aranda fortalecida y el hurtadismo consolidado, la oposición deberá reorganizarse y presentar una estrategia más efectiva si desea recuperar espacios de poder en la ciudad.
En conclusión, aunque el fallo judicial cierra la puerta a la anulación de la elección de Johana Aranda, la oposición aún puede recurrir a la revocatoria de mandato o al fortalecimiento de una alternativa política viable para las próximas elecciones. El panorama político en Ibagué sigue en disputa, y los movimientos de ambos sectores en los próximos meses definirán el futuro de la ciudad.