Un bus de turismo perdió el control tras chocar con un camión y terminó dentro de la bomba Terpel en Coyaima. Organismos de socorro atienden la emergencia ante el riesgo de incendio y con varios heridos trasladados a centros asistenciales.
Un grave accidente de tránsito sacudió la tarde de este lunes al municipio de Coyaima, cuando un bus de turismo terminó incrustado en una estación de servicio de combustible, lo que generó pánico entre trabajadores y usuarios del lugar. Testigos relataron que el vehículo, tras un choque inicial con un camión en la vía, perdió el control y se proyectó de frente contra la estructura de la bomba Terpel, impactando los surtidores y parte de la edificación. La escena quedó registrada en un video que circula en redes y que muestra la magnitud del siniestro y la preocupación por un posible incendio o explosión dada la presencia de combustibles.
Organismos de socorro —bomberos, Cruz Roja y ambulancias— se aproximaron de inmediato y desplegaron protocolos para atender a los heridos y mitigar el riesgo de un siniestro mayor. Según los primeros reportes de las autoridades locales, varias personas resultaron lesionadas y fueron atendidas en el sitio; algunos pacientes fueron trasladados a centros asistenciales de la región para evaluación y tratamiento. Por ahora no se ha entregado un balance oficial sobre la cantidad exacta de heridos ni sobre la gravedad de las lesiones, y las autoridades mantienen acordonada la zona mientras continúan las labores de atención.
Bomberos y personal de la estación trabajaron en la contención de derrames de combustibles y en la desconexión segura de las instalaciones para evitar chispas o fuentes de ignición. Los equipos especializados priorizaron la evaluación de las tanques y líneas de suministro, la limpieza de la pista y la ventilación del área afectada para disipar vapores inflamables. Hasta tanto se garantice la estabilidad del lugar, las autoridades han limitado el acceso y han ordenado la evacuación preventiva de viviendas y comercios cercanos por precaución.
La Policía de Tránsito y la Secretaría de Gobierno local cerraron temporalmente el sector y desviaron el tráfico para facilitar el trabajo de los socorristas y evitar la formación de aglomeraciones que pudieran entorpecer las labores. Transportadores y conductores manifestaron largas filas y demoras en las rutas alternas, y las autoridades recomendaron procurar vías secundarias y seguir las indicaciones de las autoridades de movilidad. La prioridad inmediata es garantizar la seguridad de las personas y confirmar que no existan riesgos residuales por el combustible derramado.
Representantes de la estación afectada y del operador del bus se presentaron en el sitio para coordinar acciones, aportar información y colaborar con las autoridades en lo que sea necesario. Mientras tanto, los vecinos y comerciantes del sector expresaron su conmoción por el hecho y destacaron la rapidez con la que actuaron los cuerpos de socorro, lo que ayudó a evitar una tragedia mayor. Testigos señalaron que la explosión o el incendio pudieron haberse producido si el impacto hubiese afectado de forma más directa los tanques subterráneos.
En paralelo, las autoridades iniciaron las investigaciones para determinar las causas del siniestro, incluyendo la posible responsabilidad del conductor del bus, el estado del vehículo, condiciones de la vía y si hubo fallas mecánicas o humanos factores como exceso de velocidad. El CTI de la Fiscalía y la Policía Judicial fueron convocados para recopilar evidencia, revisar material fílmico y tomar declaraciones a testigos, conductores y personal de la estación que presenciaron los hechos. Cualquier hallazgo preliminar será informado por las entidades competentes conforme avance la indagación.
Ante el episodio, la Alcaldía municipal emitió un llamado a la calma e invitó a los ciudadanos a mantenerse alejados del sector para no entorpecer las labores de emergencia. Además, recomendó a quienes hayan resultado afectados acudir a los puntos habilitados para atención y a presentar las denuncias o requerimientos ante las autoridades competentes si requieren apoyo médico o jurídico. La prioridad institucional es restablecer la normalidad y asegurar que no haya riesgo de nuevos incidentes.
La comunidad local seguirá pendiente de los reportes oficiales que indiquen el número de lesionados, el estado de las personas trasladadas y el parte final sobre la integralidad de la estación de servicio. Por ahora, el siniestro permanece como una advertencia sobre los riesgos viales en la región y la necesidad de reforzar medidas de prevención y control en corredores donde confluyen transporte de pasajeros, carga y estaciones de suministro.