Dos hombres de 19 y 26 años fueron capturados en el barrio Villa Café cuando transportaban ocho envolturas de marihuana y dos celulares en una motocicleta. El procedimiento se inscribe en la estrategia “Ibagué, Seguridad para Todos”.
Dos presuntos expendedores de droga fueron sorprendidos y arrestados anoche por uniformados del CAI Mirolindo durante un operativo de registro y control en el sur de Ibagué.
El procedimiento se desarrolló en la calle 77 con carrera 7 sur, sector Villa Café, donde la patrulla de la Zona de Atención Policial 27 adelantaba labores preventivas dentro del plan “Ibagué, Seguridad para Todos”.
Los agentes detectaron a dos sujetos que se desplazaban de manera sospechosa en una motocicleta. Tras ordenar la detención y realizarles el registro personal, hallaron un bolso con ocho envolturas plásticas que contenían aproximadamente 600 gramos de marihuana, además de dos teléfonos celulares.
De inmediato, los hombres —identificados con edades de 19 y 26 años— fueron esposados y trasladados a la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía, donde deberán responder por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
La motocicleta empleada para el presunto transporte de la droga también fue incautada y puesta a disposición de las autoridades judiciales como elemento material probatorio.
El mayor Ricardo Andrés Moreno Vargas, comandante del Distrito Uno de la Policía Metropolitana, destacó el resultado y recordó que los operativos contra el microtráfico continuarán de forma permanente. “Seguiremos trabajando incansablemente para garantizar espacios libres de drogas y delincuencia en cada rincón de Ibagué”, afirmó.
Según la institución, estas acciones buscan debilitar las economías ilegales que afectan la convivencia en los barrios del sur de la capital tolimense, donde recientes informes de la comunidad señalan un repunte en el menudeo de estupefacientes.
La Policía invitó a la ciudadanía a denunciar cualquier actividad sospechosa a la línea 123 o al número del cuadrante, subrayando que la información confidencial es clave para desarticular las redes de microtráfico.