El inmueble tenía 100 años de antigüedad, siendo parte del paisaje arquitectónico patrimonial que proteje el Ministerio de Cultura, pero fue destruido con el amparo al parecer, del párroco del pueblo y el alcalde Cristian Barragán.
Según se puedo establecer, el párroco Alirio Álvarez, serían quien por medio de autorización del municipio y con todos los requisitos de ley, hizo efectiva la demolición el pasado viernes 4 de noviembre con el objetivo de construir una obra nueva.
Hay que señalar, que líderes de opinión del municipio manifestan que el “Concordato” entre la iglesia y la Alcaldía de Ibagué, al parecer sería por interés de habría de por medio, teniendo de referencia la construcción de un Coliseo y un parque, a pocos metros de la vivienda del investigado Cristhian Barragán, pues cuyas obras que se ejecutan al pie de esa casa patrimonial no contaba con los permisos requeridos para el aprovechamiento forestal.
“Así quedó registrado el momento en el que con el beneplácito de la administración municipal, la curia propietaria del bien lo derriba. ¡Abajo años de historia! Duele mucho ver cómo en minutos se desvanece el patrimonio histórico del municipio”, expresó el Politólogo, Juan Guillermo Hernández Lombo.
Dentro de los conflictos que se evidencia fue la clausura hace algunos años de la carcel del municipio en uno de inmuebles de características históricas y arquitectónicas, siendo destinado en su momento para convertirse en Museo pero hasta el momento las autoridades municipales, departamentales y nacionales, aún no han cumplido.
Otro punto sería con la construcción de un polideportivo que está justamente detrás del santuario o casona de 100 años, sin embargo, esta obra ha sido cuestionada porque riñe con el entorno arquitectónico y por la millonada invertida que ronda por los 3 mil millones por canchas sintéticas y un parque.
El tercer motivo de conflicto sería con la remodelación al parque emblemático de esa municipalidad, pero en la actualidad sería una obra que lleva meses suspendida por fallas en el proceso de planeación al iniciarse sin contar con el lleno de requisitos, teniendo destruida la entonces Plaza Mayor de la Candelaria.
Como dato, este municipio fue capital provisional de la Nueva Granada en 1831 y capital del Estado Soberano del Tolima entre 1861 y 1864 y su casco urbano se consolidó inicialmente en el sector que hoy se conoce como el Barrio El Plan, de ahí su arquitectura colonial.
Finalmente, la demolición de la casona sería al parecer para contruir un “centro de evangelización” dejando atrás cientos de años de historia que el soleado rinconcito del suroriente del Tolima tiene, porque si no hay una intervención del Ministerio de Cultura, allí se seguirá atentando contra el colonial e histórico Barrio El Plan, en Purificación Tolima.