Ibagué se destaca como una de las ciudades con la inflación más baja del país, según el informe del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane). Con una variación anual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del 11,65% hasta el mes de junio, la ciudad se posiciona como la segunda con el costo de vida más bajo, solo superada por Villavicencio.
Este logro refleja las condiciones económicas favorables que benefician tanto a los ciudadanos como a los visitantes y empresarios de Ibagué. La estabilidad en los precios y la baja inflación son factores atractivos que promueven el desarrollo local y la inversión en la ciudad.
Aunque en junio se registró un aumento del IPC mensual del 0,39%, por encima de la media nacional, este incremento se debe a factores estacionales como las festividades de la temporada. Las divisiones de bebidas alcohólicas, salud y combustible experimentaron un aumento de precios en ese período.
La secretaria de Desarrollo Económico Municipal, Alba Lucía García, señaló que este incremento es esperado debido al aumento en la demanda durante las festividades. Sin embargo, destacó que todos los sectores de la ciudad experimentaron un impacto positivo en su economía, generando ingresos cercanos a los $130 mil millones.
La baja inflación en Ibagué se traduce en un menor impacto en los bolsillos de los ciudadanos y en los costos de vida en general. Esto contribuye a mejorar la calidad de vida de la población y a fortalecer la economía local. A pesar de los desafíos económicos a nivel nacional, Ibagué se mantiene como una ciudad atractiva para vivir, trabajar y emprender.
Finalmente, las autoridades locales continúan trabajando para mantener un entorno propicio para el crecimiento económico y el bienestar de la comunidad. La estabilidad en los precios y la baja inflación son elementos clave que fomentan la confianza de los inversionistas y promueven un ambiente favorable para el desarrollo empresarial en Ibagué.