El ministro de Defensa, Iván Velásquez, fue citado a un debate de control político en la Comisión Segunda de la Cámara de Representantes, donde deberá responder por la salida de operación de 22 helicópteros Black Hawk de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC). La decisión, que se debe a la suspensión de cooperación internacional por parte de Estados Unidos, ha generado fuertes críticas debido a sus implicaciones en la seguridad nacional.
El debate fue solicitado por el representante Jhon Jairo Berrio, del partido Centro Democrático, quien cuestionó la falta de previsión del Gobierno ante la interrupción del contrato de mantenimiento de estas aeronaves. Según Berrio, la salida de operación de los helicópteros afectará gravemente la lucha contra el narcotráfico, el crimen organizado y el terrorismo en el país.
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Además de la afectación operativa, el debate abordará la creciente expansión territorial de grupos armados ilegales, como el ELN, el Clan del Golfo y las disidencias de las FARC. Se analizará cómo estas estructuras han logrado consolidar corredores estratégicos para el tráfico de drogas y el control de territorios sin una respuesta efectiva del Estado.
El congresista opositor también señaló que se cuestionará la inacción del Gobierno y del Ministerio de Defensa frente a la creciente violencia en varias regiones del país. Según Berrio, el debilitamiento de las capacidades operativas de la Fuerza Pública ha permitido un deterioro en la seguridad y un retroceso en la lucha contra el crimen organizado.
Por su parte, la Policía Nacional informó en un comunicado que, pese a la suspensión de los 22 helicópteros, continuará operando con 14 aeronaves Black Hawk: 10 propias y 4 del programa de cooperación con Estados Unidos. También aseguró que la agenda binacional con el país norteamericano seguirá en curso a través de diferentes agencias para fortalecer la lucha contra el narcotráfico.
A pesar de estas declaraciones, la salida de operación de la flota aérea representa un golpe significativo para las tareas de seguridad y defensa del país. Los helicópteros Black Hawk no solo son utilizados para operaciones militares, sino también para el transporte de tropas, misiones de combate y labores humanitarias como la extinción de incendios y el rescate en zonas de difícil acceso.
Cabe resaltar que estos helicópteros fueron asignados a Colombia bajo un esquema de cooperación en el que Estados Unidos asumía los costos de mantenimiento y combustible, mientras que el Gobierno colombiano se encargaba de la operación y la tripulación. La suspensión de este apoyo deja en evidencia la fragilidad de la estrategia de seguridad del país.
El debate de control político con la participación del ministro Velásquez será clave para conocer las medidas que tomará el Gobierno ante la pérdida de estas capacidades operativas y las acciones que se implementarán para mitigar el impacto en la seguridad nacional.