La Confederación Sudamericana de Fútbol CONMEBOL, tuvo hoy en sesión extraordinaria de manera virtual un tratamiento especial y es la programación de la Copa América que se piensa realizar en conjunto con Argentina y que estaba proyectada para celebrarse en el 2020, pero por las dificultades de la pandemia del COVID-19 no se pudo realizar en el mencionado año. Pues tal parece que hoy esta preocupación vuelve a tener más avivamiento, ya que Colombia es una de las sedes de este evento, pero el país enfrenta una crisis social muy aguda, que preocuparía verse torpedeada por los altos indices de inseguridad que traería un evento en medio de un país levantado en protestas.
El presidente de la misma federación en dicha reunión expresó que “sería muy difícil garantizar un evento deportivo si existe una sociedad inconforme con su estado, y con la mayor de la pena tendríamos que vernos obligados a buscar otra sede si las alteraciones de orden público no se regulan para la celebración de la copa” fueron las palabras de Alejandro Dominguez, presidente de la CONMEBOL. Esta preocupación toma más fuerza debido a los últimos cambios recientes en el calendario de los equipos colombianos que participan en los torneos de Conmebol Sudamericana y Conmebol Libertadores, donde Tolima, Santa Fe, Junior, Equidad, América de Cali y Nacional tendrán que ponerse al día en sus partidos jugando en una sede diferente a su país de origen, ya que la misma confederación les ha pedido que trasladen sus equipos a la ciudad de Asunción, Paraguay, donde los encuentros se disputarán en el estadio Defensores del Chaco.
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También se vio con extrañeza que para esta asamblea extraordinaria no fe invitado Ramón Jessurum, presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, lo que hace avivar más la presunta toma de decisión, ya que a Colombia le quedan pocos días para decidir si realiza el evento internacional o no.
Esto toma más fuerza luego de las declaraciones del periodista Argentino Pablo Carroza, quien también pidió que al país cafetero se le quite la sede de la copa ya que por sus alteraciones en el orden público no es viable celebrar dicho evento en este país. “En nuestro país se celebró un Mundial, a pocas cuadras del mayor centro de detención ilegal, tortura y asesinato de la última dictadura. No cometan la misma atrocidad. Colombia se está desangrando. No es tiempo de hablar de fútbol. Y mucho menos de organizar una Copa América” concluyó el periodista en una de sus declaraciones.
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